La Diputación de Zamora pide que se mantenga el actual estatus del lobo al norte del Duero y, por lo tanto, que siga considerándose especie cinegética. Así consta en las alegaciones a la inclusión en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial.

La institución provincial muestra su “total rechazo” al procedimiento seguido por el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico “sin haber tenido en cuenta ponderadamente la opinión de las comunidades autónomas afectadas ni la de las organizaciones profesionales agrarias como legítimos representantes del mundo del campo en nuestra provincia”. Por ello, solicita al Ministerio que reconduzca las actuaciones e inicie “de inmediato un diálogo serio con las comunidades autónomas que albergan poblaciones de lobo ibérico y con las organizaciones profesionales agrarias, con el objetivo de implantar en España un procedimiento de control de esta especie que permita preservar la ganadería extensiva y semi extensiva a la vez que conservar los recursos naturales, eliminando la propuesta de sobre protección del lobo ibérico que han iniciado”.

La Diputación rechaza cualquier planteamiento de utilizar la financiación de la PAC para compensar a los ganaderos afectados.

La Junta defiende la caza como herramienta de control

La institución provincial demanda que la caza se considerada como una herramienta necesaria para el control de la fauna salvaje en general, también del lobo ibérico. El escrito de alegaciones expone que Castilla y León y la provincia de Zamora albergan una rica biodiversidad bien conservada, siendo esta Comunidad Autónoma, esta provincia en particular, las que, con diferencia más lobos acogen y los territorios donde más se ha respetado esta especie en los últimos decenios.

En este sentido, añade que, según los datos del último censo nacional, el 60.2 por ciento de los lobos existentes en España “se encuentran en esta comunidad autónoma y, concretamente, 400 de ellos están ubicados en la provincia de Zamora”.

La Diputación resalta la ganadería extensiva como “una de las principales actividades económicas, cuando no la principal, en muchas zonas de la provincia de Zamora”, y por ello se considera una actividad imprescindible para lograr un equilibrio entre la conservación del lobo y su coexistencia con la ganadería extensiva. Las alegaciones remitidas a ambos ministerios concluyen que el equilibrio está más próximo en las poblaciones del norte de Castilla y León, con una mayor flexibilidad en su gestión donde el lobo es una especie cinegética.

La Junta ha reclamado, junto a otras tres comunidades autónomas, una reunión extraordinaria de la conferencia sectorial de Medio Ambiente para abordar la cuestión del lobo. Así lo ha confirmado este lunes el consejero del área, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ayer durante una visita a Zamora. Quiñones ha vuelto a criticar el proyecto de incluir al lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, una iniciativa que, a su juicio, “causa un grave perjuicio” a zonas como Zamora. “Mostramos nuestra oposición frontal, por fondo y por forma”, ha advertido el consejero, visiblemente molesto con el “desprecio” de la vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera, al ignorar a las comunidades autónomas. “Aquí ya sabemos lo negativa que es la protección estricta del lobo”, ha remarcado Quiñones, que ha lamentado el uso de “alegaciones de tipo ideológico y dogmático” por parte del Gobierno para defender su postura. El consejero de Fomento y Medio Ambiente ha advertido que la Junta “no va a aceptar medidas del ecologismo de asfalto”, y ha expresado su respaldo a “todas las manifestaciones que sirvan para apoyar a los pueblos”.