La nieve y el hielo que deja a su paso la borrasca Filomena ha sido la causa de varios accidentes de tráfico en carreteras de la provincia de Zamora.
Estos percances, en su mayoría salidas de vía en tramos donde la calzada resbalaba, han obligado a la intervención de la Guardia Civil de Zamora para auxiliar a los conductores cuyos coches habían quedado atrapados por la nieve en los márgenes de las carreteras.
En el sur de la provincia, la Guardia Civil de Tráfico y un camión de Conservación de Carreteras tuvieron que rescatar un vehículo que había quedado en la mediana de la A-66 a la altura de El Cubo de la Tierra del Vino. La Benemérita también tuvo que auxiliar a un conductor cuya furgoneta se salió de la calzada en la carretera N-122.
Pero este tipo de sucesos también ocurrían en carreteras autonómicas, como la CL-605 (carretera de Fuentesaúco), en el kilómetro 155, entre las localidades de Gema y el Piñero, donde varios vehículos tenían dificultades y un vehículo había acabado en la cuneta. Todos ellos fueron auxiliados por una Unidad de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil.
No muy lejos de allí, lo mismo ocurrió a otros conductores en La Bóveda de Toro.
A pesar de que las máquinas quitanieves de la Diputación de Zamora, la Junta de Castilla y León y el Ministerio de Transporte llevan todo el día trabajando, a esta hora sigue cayendo nieve que dificulta la circulación en distintos puntos de la provincia. Por eso, se recomienda evitar los desplazamientos en vehículo que no sean imprescindibles y, de hacerlo, es indispensable utilizar cadenas de nieve o neumáticos de invierno, además de llevar el depósito de combustible lleno y meter mantas, comida y agua potable en el coche antes de salir.
