La frontera de Rihonor y Rio de Onor amaneció el martes con un gran bloque de hormigón por el lado portugués, y una valla de hierro por el lado español, un corte que "ni en la guerra" que impide el desenvolvimiento de la aldea binacional por excelencia, como comentan los vecinos.

El bloque impide el tránsito de tractores e incluso a pie a los ganaderos para dar de comer o llevar alimento a los animales. En la misma tesitura se encuentran los obreros de la construcción de nacionalidad portuguesa que tienen que ir a trabajar a empresas de Sanabria. En este caso cuentan con el salvoconducto de sus empresas para poder pasar, control que efectuaba la Guardia Civil en zona fronteriza. El único paso oficial es por Quintanilla, la Nacional 122.

El mismo o parecido cierre se aplica en otros pasos froterizos, como Bemposta o Miranda. En Bemposta los efectivos de la Guardia Nacional Republicana mantenían ayer una estrecha vigilancia y, conocedores del impacto del coronavirus en Fermoselle, preguntaban por la situación en Zamora y en España.

La delegada Territorial de la Junta de Castilla y León, Clara San Damián, informó ayer de que todos los pasos fronterizos con Portugal de las carreteras autonómicas están cerrados al tráfico y ningún vehículo puede acceder al país vecino ni entrar desde el otro lado de la frontera.

Reiteró que se mantiene abierto para casos excepcionales el paso de la N-122, a través del desvío para dirigir el tráfico hacia la N-122.

Concretamente los pasos cerrados al tráfico en la provincia de Zamora son los de las carreteras:

Cl-527 de Zamora a la Frontera con Portugal, ZA-324 de Ricobayo a la Frontera con Portugal , ZA-921 de Puebla de Sanabria por Rihonor a la Frontera con Portugal, ZA-925 de Puebla de Sanabria por Calabor a la Frontera con Portugal.

La Junta de Castilla y León recomienda a los vehículos que cambien su ruta antes de llegar a los pasos, para evitar dificultades para dar la vuelta y tener que desandar el trayecto recorrido.

Clara San Damian indica, respecto a las carreteras, que "es fundamental, para la tranquilidad de todos, garantizar a los ciudadanos en todo momento, si fuera necesario, el tránsito, especialmente para los vehículos imprescindibles que prestan servicios a nuestras zonas rurales, como el transporte de mercancías que suministra de productos básicos a los pueblos teniendo en cuenta que muchos de ellos solo disponen de venta ambulante, el transporte de viajeros, y especialmente el transporte sanitario"

Ha señalado también que "aunque en este momento nuestras carreteras están limpias de hielo y nieve, el dispositivo de vialidad invernal, tanto humano como material, está preparado para cualquier inclemencia metereológica que pudiera complicar la circulación. Ello en colaboración con el resto de las administraciones con competencias en esta materia"

Por otra parte, la Guardia Civil de Sanabria ha interpuesto las tres primeras denuncias a vecinos de la comarca por desobediencia a la autoridad por incumplir la cuarentana y estar confinados en sus casas. No han trascendido las localidades donde se realizaron las denuncias.

El cuadro de riesgo de la población de edad avanzada, despierta especial preocupación por las personas mayores que viven solas en los pueblos, aunque los agentes tienen en marcha el Plan Mayor de Seguridad que conlleva un especial seguimiento de estas personas. Comerciantes, restaurantes y hasta taxistas de la comarca se han ofrecido a colaborar para estos casos, acercar comida o medicinas.

El Ayuntamiento de Puebla ha puesto a disposición de los vecinos la ayuda del agente de policía municipal que todos los días recorre de mañana y tarde las tres pedanías y alerta por megafonía a los vecinos para que en caso de necesidad llamen a los teléfonos del Ayuntamiento y de la Policía Municipal.

La dispersión y el abastecimiento de los pueblos es algo no contemplado en la larga lista de indicaciones del BOE y de las Comunidades Autónomas, que están resolviendo los ayuntamientos con medios limitadísimos. En los núcleos comerciales, como Mombuey, los comercios han ajustado sus horarios, cara al público, a la jornada de mañana para cerrar prácticamente todos los establecimientos en el horario de tarde. "Hay un mayor movimiento de personas, de los pueblos de la comarca de Carballeda por la mañana, que van a hacer la compra" explicaba una de las vecinas que trabaja a puerta cerrada en las oficinas de una empresa.