Los quintos de Fuentesaúco han puesto colofón a su reinado con cuatro intensos días de fiesta, protagonizados por la camaradería y la diversión sin olvidar una fantástica mañana de caza. La fiesta comenzó el jueves por la noche con la reunión en el local de la Plaza de Toros, donde quintos y quintas invitaron a cerveza. La mañana de viernes se dedicó a la ronda por las casas pidiendo el aguinaldo para continuar por la tarde con la fiesta de la cerveza y baile en el salón. El sábado los jóvenes participaron en una divertida mañana de caza junto a cazadores. Aunque las seis carreras a la liebre terminaron sin trofeo, todos dieron buena cuenta de un "almuerzo" campero para cerrar la fiesta con baile hasta la madrugada.