El Gobierno y los diferentes organismos competentes están prestando todo el apoyo necesario a la menor que sufrió una presunta agresión sexual por parte de un guardia civil del acuartelamiento de Puebla, según apuntó hoy el subdelegado de Gobierno, Ángel Blanco.

"Estamos totalmente en contra de este tipo delito, que son terribles y horroríficos, y a la víctima la apoyamos dándole y facilitando todos los mecanismos de que disponemos, psicológico, de índole laboral para intentar, dentro de lo posible, paliar los efectos nocivos que tienen en las víctimas este tipo de delitos" manifestó sobre un caso que ha conmocionado en Puebla y entorno.

La Subdelegación defendió la actuación llevada a cabo desde que ocurrieron los hechos, con un agente de la Benemérita detenido a consecuencia de una denuncia presentada el pasado 19 de julio por un familiar de la presunta víctima.

"Rápidamente las diligencias dieron los resultados y la persona que se detuvo se puso a disposición de la autoridad judicial del Juzgado de Puebla de Sanabria y la juez decretó su ingreso en prisión" en Topas.

Recalcó Ángel Blanco en la necesidad de no facilitar mayores datos sobre el presunto agresor y el lugar donde ocurrieron los hechos, si Puebla o un pueblo del entorno, porque "la presunta víctima es una menor, con lo cual debemos ser muy cuidadosos para preservar su integridad e intimidad". "Estamos hablando, dijo, no sólo del código penal, que ya es duro de por sí en los delitos contra la libertad sexual, pero aquí estamos de un nuevo concepto de indemnidad, que afecta a una menor". Apuntó que "por culpa de una manifestación o una palabra demás podemos causar un perjuicio grave en el desarrollo de la personalidad de la menor", y remarcó que "estamos hablando siempre de presunción, hasta que no haya una sentencia".