Debajo de cada caso de éxito hay todo un iceberg de persistencia, dedicación, sacrificio, esfuerzo, buenos hábitos, trabajo duro y autosuperación que sostiene "la punta" que los demás podemos ver. Una trayectoria vital con sus satisfacciones, pero también con muchos tragos amargos, por eso nunca está demás recibir un espaldarazo, un reconocimiento al buen trabajo. Es lo que vivirán este sábado en Cañizo los terracampinos galardonados en los premios "Un diez para diez" que reconocen el éxito y el esfuerzo de gente de esta comarca que ha triunfado en diferentes ámbitos y que contribuye a mejorar el entorno que les rodea, unos premios que organizan las revistas de Castroverde de Campos, Valdunquillo (Valladolid) y Gordoncillo (León) junto con la asociación de Villamayor de Campos.
Un premio merecido, sin duda, es el que reconoce el mejor expediente académico de 2019, que recae en la joven Carolina Barba Vázquez, una vecina de Villárdiga nacida en 2003 y alumna del instituto IES Tierra de Campos, de Villalpando, donde el pasado mes de junio terminó la Educación Secundaria Obligatoria con una media de 9,8. El sábado en Cañizo Carolina recibirá un 10 para que siga estudiando como hasta ahora durante el Bachillerato, el siguiente paso para llegar a cumplir su sueño de ser cardióloga y salvar vidas.
En la categoría de "artes plásticas" será premiado un vecino de Villanueva del Campo, Raúl Moreno de Paz, de 28 años, que trabaja tallando con sus manos las piedras con las que se está levantando la torre de Jesucristo de La Sagrada Familia, la catedral barcelonesa Patrimonio de la Humanidad.
Tras estudiar la educación obligatoria en la comarca, Raúl cursó el Bachillerato Artístico en Zamora, donde nació su pasión por la escultura de la mano de uno de sus profesores, Ismael. Tras pasar por distintas escuelas especializadas en esta disciplina artística se fue a Pontevedra para aprender a trabajar el granito durante 5 años. Ya en 2018 se mudó a Cataluña y ahora trabaja en Granits Barbany, la empresa que proporciona la piedra a la construcción de esa parte del templo diseñado por Antoni Gaudí. Pese a su juventud, Raúl ya ha esculpido más de una obra para la provincia de Zamora como una virgen para Castroverde de Campos, la fuente de la plaza del Pavo de este mismo pueblo o el monumento a los represaliados por la dictadura franquista que se ubica en el barrio de Olivares de Zamora.
Pero la trayectoria vital más larga y rica que se verá reconocida en la gala del sábado, en Cañizo, es la de Petra Rodríguez Conde-Nemeth, una zamorana de Prado que vive en Arizona, Estados Unidos, donde continuamente desarrolla una impagable labor de difusión de la cultura española y de los valores de su patria. Petra fundó y es presidenta de la Asociación de Españoles en Arizona (AEAZ) y ahora también es presidenta a su vez de la Federación de Asociaciones Españolas de Estados Unidos (Faeusa). Petra Rodríguez viene ejerciendo desde hace muchos años, y por iniciativa propia, un trabajo de embajadora oficiosa de España en la sociedad civil estadounidense, algo que en 2019 ha reconocido el propio rey Felipe VI al entregarle la condecoración de la Encomienda de la Orden de Isabel la Católica. Ahora también recibirá el reconocimiento de sus paisanos terracampinos con un "diez" a la "difusión comarcal".
Petra está casada con un militar estadounidense y ha vivido en zonas del país norteamericano tan diferentes como Texas, Arkansas, California o, en la actualidad, Arizona. Es una "vieja amiga" de los lectores de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA por ser una habitual de la sección "Zamoranos por el mundo". Pese a su periplo, nunca ha perdido el contacto con su Prado natal ni ha perdido el gusto por el vino de Toro, el queso de oveja terracampino o los feos de Villalpando.
Otro de los premios reconoce a una asociación con una trayectoria un poco más corta de tres años pero que es fruto de la suma de muchas trayectorias vitales bastante más largas. El premio "Revistas rurales" pretende agradecer el esfuerzo de los editores de la revista "La Miaja", de la Asociación Amigos de Cañizo. El próximo mes de agosto los vecinos de Cañizo podrán leer el tercer número de esta publicación anual de carácter antropológico que rememora tradiciones locales y difunde acontecimientos históricos de este pueblo terracampino, además de recoger la actualidad de cada año para que las futuras generaciones puedan conocer también el Cañizo de principios del siglo XXI. Algunos de los temas que se han abordado en las anteriores ediciones son la emigración de mediados del siglo XX, la riada de 1962 que destruyó gran parte del municipio o el catastro del marqués de la Ensenada de 1751. Sus páginas están abiertas a todo el que quiera escribir sobre Cañizo o la Tierra de Campos en beneficio de la unidad del pueblo.
El origen de la palabra que da título a la revista, "La Miaja", es un término vinculado a la fiesta de las Águedas, una de las más arraigadas "en este pueblo pequeño pero lugar grande que es Cañizo", explican los editores de la publicación, "asemejando cada artículo editado al pequeño aperitivo que durante las fiestas se dispensa en cada casa de la localidad. La presentación de cada número es un acontecimiento muy esperado en este pueblo y recae esta responsabilidad en hijos ilustres del pueblo, académicos de pueblos vecinos o conferenciantes que disertan sobre los contenidos de cada edición y sobre la vida rural en general.
Junto a los cuatro zamoranos serán galardonadas también otras personas y asociaciones de pueblos terracampinos de las otras tres provincias que conforman Tierra de Campos. En la categoría de asociacionismo, la asociación cultural "La Fuentina" de Fuentes de Carbajal (León), en la categoría "Compromiso en Tierra de Campos" la fundación Rehabitar y su directora Izaskun Villena, de Cuenca de Campos (Valladolid), en la de etnografía "El Palomar del Camino" de Villalcázar de Sirga (Palencia), el premio a la iniciativa empresarial es para SMRC-Automotive de Medina de Rioseco (Valladolid) y por último, pero no menos importante, el de música recae en la banda de trompetas y tambores San Roque de Valderas (León).
