Varios pueblos de la comarca de Aliste,Tábara y Alba deberán afrontar la construcción de ETAP (estaciones depuradoras de agua potable) con vistas a eliminar sustancias como el hierro y manganeso y de esta manera poder garantizar a la población el suministro de un liquido elemento acorde a las necesidades y los tiempos, cumpliendo la normativa sanitaria, durante las cuatro estaciones del año. Para ello se habrán de invertir 396.768,63 euros dentro del Plan de la Sequía de 2018. Tras un año de espera los vecinos dan la bienvenida a la época estival con el mismo problema que ya tenían y sufrían hace ahora 365 días.

Domez de Alba (municipio de Gallegos del Río) el presupuesto base de licitación para la ejecución mediante contrata de la estación depuradora de agua potable ascenderá a un total de 99.658,63 euros: 89.692,77 aportará la Institución Provincial y los restantes 9.965 el Ayuntamiento que pasó a presidir el pasado sábado Pascual Martín Blanco. El objetivo será eliminar el manganeso y el hierro en un pueblo que cuenta con 168 habitantes de los cuales 87 son hombres y 81 mujeres.

En San Vitero el proyecto de la ETAP fija la inversión en 178.878 euros. En Ferreruela de Tábara también será necesaria una estación depuradora de agua potable con un coste de 49.590 euros. El problema más grave se vive desde hace varios años en la localidad de Arcillera (municipio de Fonfría) donde habrán de invertirse 68.642 euros. Los vecinos se han venido abasteciendo para el consumo con garrafas de agua de Calabor. El alcalde de Fonfría Sergio López deberá afrontar la solución de un problema que sobrevivió a los tres alcaldes la pasada legislatura: Jesús Lira, José María Ríos y Valentín Macho. Vecinos de los cuatro pueblos asumen que va a ser muy difícil que se solucione el problema antes del verano cuando no se ha hecho a lo largo de doce meses.