La fauna salvaje está cambiando sus hábitos hasta convertirse en callejera y convivir con los vecinos como si tal cosa. Así lo demostraba días pasados un lobo ibérico al pasear tranquilamente por la calle La Fuente de Litos. Una nueva estampa se está repitiendo ahora cada día en la localidad alistana de Villarino Cebal, perteneciente al municipio de San Vitero. Un zorro común pasea tranquilamente por las calles del pueblo lo mismo por la mañana que por la tarde. Es habitual su presencia en la pradera situada junto a la calle principal donde los transeúntes lo admiran con sorpresa: "Es un zorro muy casero, antes veías uno en el campo y salía corriendo como alma que lleva el diablo, este no, pasea tranquilamente, se deja fotografiar y sigue su camino, pero sin prisas". Se ha convertido en un residente más de Villarino.