La información histórica, recogida en la memoria técnica y basada en el estudio realizado por Santiago Samaniego, detalla que la construcción del Teatro Municipal hunde sus raíces en febrero del año 1872, cuando se proyecta la construcción de un edificio "en el Campo de Santa María" que en parte se financiaría con la subasta del arbolado del paseo del cementerio. En concreto 73 árboles de madera de negrillo que permitirán recaudar 528 pesetas. Se aprueba la cesión del terreno para edificar un salón "con destino a colegio electoral, operaciones de quintas y demás reuniones públicas oficiales de carácter municipal" por ser insuficiente para estos actos la Casa Consistorial. Dos años más tarde se amplió la edificación con la compra de una casa contigua por la parte de atrás a su propietario Miguel Rodríguez Durán "con la finalidad de agregarla al cuerpo del teatro" precisa la investigación de Santiago Samaniego. En el año 1884 se realizó una intervención en el edificio por un valor de 345 pesetas.

Con una superficie construida de 629 metros cuadrados, el Teatro Municipal es uno de los edificios emblemáticos de Fuentesaúco y gran referente cultural y social del pueblo.