El Ayuntamiento de Galende ha decidido, de forma unilateral, desbloquear el problema de los residuos en los alrededores del Lago de Sanabria. Su alcalde, el socialista José Manuel Prieto, aseguró ayer que el consistorio va a asumir el coste de la recogida de las basuras generadas en el entorno del espacio natural y hoy mismo podrían empezar a trabajar los camiones de la limpieza. Se espera que la frecuencia del servicio sea de "tres o cuatro días" de recogida por semana, aunque existe la posibilidad de incrementarla en función de la necesidad.

"No podíamos permitirnos seguir con esta situación", afirmó ayer Prieto, quien también criticó "el poco interés" mostrado por la Diputación provincial de Zamora y la Junta de Castilla y León para atender la problemática de las basuras. El alcalde cifró el coste de la recogida en unos 20.000 euros solo en la temporada alta. La factura anual se eleva a 38.000 euros.

Prieto también deslizó la posibilidad de proponer al Pleno del Ayuntamiento de Galende la salida del Parque Natural del Lago de Sanabria y Sierras de Porto y Segundera. Reconoce que "es difícil" que esa medida pueda salir adelante pero advierte de que su voluntad es consultar a los alcaldes de los municipios circundantes para sumar apoyos. Cabe señalar que el municipio que aporta más terreno a este espacio protegido es Porto de Sanabria, seguido de Galende. "La permanencia en el Parque Natural sería buena para Galende si todas las administraciones se hiciesen cargo de su parte", señaló Prieto.

En este sentido, el alcalde baraja emprender acciones legales contra la Junta para que sea la Justicia quien resuelva las responsabilidades que le corresponde asumir a cada institución en lo relativo al Parque Natural. Como ejemplo, el alcalde de Galende recordó que durante la temporada baja, los aseos cuya gestión depende de la Junta han permanecido cerrados, "provocando más residuos en los alrededores del Lago".

Otra medida que estudia enviar al Pleno, una vez concluida la temporada de verano, es retirar los contenedores de basura que han sido el foco de la polémica en las últimas semanas.

Al margen del problema de los residuos, Prieto también quiso "destapar" la baja actividad de las depuradoras del Lago, cuya gestión corresponde a la Junta, la Diputación y el Ayuntamiento. El alcalde subrayó que eso no significa que el agua esté contaminada pero sí apremió a la Junta a iniciar los trabajos de reforma de una obra "que se hizo mal" desde el principio.