Un total de 36 perros utilizados para la caza mayor, tres de ellos de presa, fueron ayer rescatados de una nave de Valdeperdices, donde se encontraban en "muy malas condiciones". La intervención del Seprona de la Guardia Civil se produjo a raíz de una denuncia de la Protectora de Animales Scooby, que a su vez recibió la voz de alarma de unos "veraneantes" que se encontraban por la zona del embalse. Alertados al escuchar los grandes aullidos que salían de una finca en las cercanías de Valdeperdices, se acercaron hasta el lugar e intuyeron que nada bueno ocurría en una nave medio derruida.

Hasta el lugar se desplazaron voluntarios de la Protectora de Animales y agentes de la Guardia Civil que la tarde del domingo pudieron comprobar la situación en la que se encontraban los perros, algunos famélicos y en estado de "desnutrición severa", otros con heridas y evidentes signos de maltrato. Una prueba la tuvieron ante sus ojos los propios agentes de la Guardia Civil y la Protectora al comprobar cómo un galgo, casi en los huesos, estaba comiendo a un perro muerto mientras otros animales merodean alrededor del cadáver.

Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Zamora tomaron ayer por la mañana declaración al dueño de los animales que, una vez concluidas las diligencias, pasará a disposición judicial. Esta persona, originaria de un pueblo de Tierra del Vino, ya tiene antecedentes por un delito de maltrato animal. Ha estado procesado por matar de un tiro en la cabeza a un perro alano utilizado para el amarre de caza mayor tras participar en una montería en Faramontanos de Tábara, el 3 de octubre de 2015.

Tras negar que existiera maltrato, el dueño de los perros aseguraba ayer a este diario que denunciaría la entrada "en una propiedad privada" y exigirá la devolución de los animales "en el mismo estado" que, según él, se encontraban antes de que alguien los soltara dentro y eso provocara peleas entre los propios canes.

El deplorable estado en el que se encontraban los perros en la nave de Valdeperdices propició la rápida intervención para su rescate, que se llevó a cabo ayer con la participación de los Servicios Veterinarios de la Junta de Castilla y León. Los técnicos procedieron a la identificación de los canes comprobando si disponían del microchip y, uno a uno, eran introducidos en jaulas en una furgoneta camino de instalaciones de la Sociedad Protectora de Animales, que se hará cargo de su cuidado.

Fuentes de la Protectora han asegurado que "todos los perros, sin excepción" requieren asistencia veterinaria, empezando por la "desparasitación inmediata". Incluso se temía por la vida de algún animal, dado el aparente mal estado en el que se encuentran. Se trata de perros de caza, entre los que hay galgos, podencos o grifones, que serían utilizados para monterías.

Desde la Protectora Scooby Zamora se ha hecho un llamamiento a la colaboración ciudadana para poder hacer frente a la atención de los 36 perros que desde ayer ya están a su cuidado. Se suman a los aproximadamente 500 que esta asociación de defensa de los animales tiene a su cuidado en las distintas instalaciones con las que cuenta en Castilla y León.