Las personas interesadas en realizar quemas controladas durante este nuevo período, 15 primeros días de junio, tienen que acercarse a la oficina comarcal de Medio Ambiente en Alcañices y hacer la solicitud por escrito. Cada autorización de una quema controlada por Medio Ambiente lleva implícita una serie de normas que hay que cumplir para evitar sustos y peligros. En la mayoría de los casos los solicitantes son personas jubiladas, algunas veces de avanzada edad, con lo cual todas las precauciones son pocas. Es muy importante que la persona que vaya a hacer la quema vaya siempre acompañada por otra, nunca sola. Además hay que llevar una mochila de agua de 16 litros y un bate fuego para en caso de incendio actuar mientras llegan los medios de extinción.

Otra de las cosas a tener en cuenta es que la normativa contra incendios de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León prohíbe tajantemente, incluso en otoño, invierno y primavera, el encendido de hogueras y fogatas en los campos. "Como excepción, fuera de la época de peligro alto y medio de incendios y únicamente para personas cuya labor profesional se desarrolle en el monte como pastores y trabajadores forestales, se podrá encender fuego para preparar alimentos y calentarse, debiendo adoptar medidas de seguridad precisas para que el fuego no pueda propagarse", señala la normativa. Las sanciones por la provocación de incendios pueden alcanzar los 1.000 euros, a lo que habría que sumar el pago de los gastos del operativos e indirectamente la prohibición del pastoreo y la caza en los terrenos calcinados.