La muerte de un importante número de peces en el embalse de Almendra, en el litoral zamorano, y el absoluto desconocimiento de la causa por parte de la Mancomunidad de Sayagua y de los ayuntamientos, es un episodio que ha generado preocupación entre la población sayaguesa.

Casi medio centenar de poblaciones se abastecen de las aguas de este pantano, asentado en el Tormes, a través de la red de la Mancomunidad de Sayagua.

La falta de información alimenta las inquietudes y mantiene la confianza de que la plantas potabilizadoras funcionen correctamente, aunque existen los temores por si el agente causante de la muerte tenga una naturaleza tóxica.

El reguero de cadáveres de ejemplares de diferentes especies, especialmente carpas, pero también barbos y luciopercas, según los pescadores, se extiende a lo largo de varios kilómetros. Se observan peces muertos por las orillas zamoranas, desde Carbellino hasta el lugar que acogió el pueblo de Argusino, cercano ya a propia presa.

El alcalde de Fermoselle, cuya población se abastece de Almendra, tiene previsto reclamar hoy información a los organismos competentes así como a la empresa Aquona, según indicó el alcalde del municipio Alejandro Fermoselle. También el regidor de Carbellino, Benito Sánchez Piorno, considera que ante este suceso debe darse una explicación a la población para mantener un servicio con garantías y saludable.

El vecino Ramón Moralejo, de Salce, puso de relieve que ayer unos pescadores le confirmaron la existencia de peces muertos en las orillas del embalse que tocan a este pueblo, y asegura que la mayor parte de la población prefiere beber el agua embotellada.

Agentes de la Guardería Medioambiental recorrieron ayer algunos puntos del Almendra y certificaron la mortandad, aunque el origen de la misma corresponda averiguarla a la Confederación Hidrográfica del Duero, a la Consejería de Medio Ambiente e incluso a la propia gestora del aprovechamiento hidroeléctrico, Iberdrola, todas ellas conscientes del suceso.

La visión de cuerpos muertos flotando o varados al borde del agua es decepcionante. Los ejemplares aparecen salpicados por uno y otro punto de la orilla, con algunos peces todavía vivos pero en un estado agónico, intentando desesperadamente encontrar oxígeno tendidos panza arriba.

La fauna silvestre y los propios predadores del embalse se han encargado de sacar el máximo rendimiento a la situación y abundan los cadáveres comidos, en algunos casos sin más material que el propio esqueleto, al haber sido aprovechado por aves y otros animales carroñeros tras sacarlos del agua, para devorarlos, a gusto, en tierra.

El aspecto descompuesto de algunos cadáveres evidencia que murieron días atrás, otros recientemente porque siguen intactos.

Pocos pescadores optaron ayer por afincarse en las mangas o recodos del Almendra. Un grupo de aficionados portugueses instalaron sus cañas, pero pronto mudaron de lugar. No les agradó el fondo "porque los anzuelos cogían arrastres", según expresó uno de los cañistas. Al observar algunos cadáveres de carpas en la zona quedaban un tanto perplejos y preguntándose por las posibles causas de la muerte.

La red de abastecimiento de Sayagua, desde el Almendra, cuya toma está emplazada en Carbellino, un escenario también afectado por la muerte de algún pez, se extiende por un total de cerca de 400 kilómetros. La Mancomunidad de Sayagua, cuyo presidente Carlos Vega dijo ayer enterarse por la prensa, suministra agua a las poblaciones de Carbellino, Roelos, Salce, Cibanal, Formariz, Fornillos de Fermoselle, Pinilla, Palazuelo de Sayago, Mámoles, Fariza, Concurrita, Badilla, Argañín, Gamones, Tudera, Zafara, Muga, Villamor de la Ladre, Pasariegos, Bermillo, Villamor de Cadozos, Almeida, Escuadro, Alfaraz, Moraleja y la dehesa de Pelilla. Otra de las redes abastecece a las poblaciones de Torrefrades, Fresno, Mogátar, Sobradillo, La Tuda, Las Enillas, Pueblica de Campeán, Pereruela, San Román de los Infantes, Arcillo, Malillos, Sogo, Piñuel, Gáname, Abelón, Moral, Moralina, Torregamones, Monumenta, Luelmo y Fresnadillo. También los numerosos pueblos de la provincial salmantina que se suministran del Almendra están expectantes y a la espera de los resultados de los análisis.