Dos incendios declarados en menos de 24 horas en la comarca de Tierra de Campos han causado por un lado serios daños en el restaurante Oviedo, situado a mitad de camino de Granja de Moreruela y Santovenia del Esla, y un segundo ha destruido prácticamente por completo una vivienda en Villar de Fallaves.

El fuego en el conocido restaurante, situado en la carretera N-630 (de Zamora a Benavente) se declaró poco antes de las nueve de la noche del pasado miércoles cuando las trabajadoras preparaban la cena para los diez huéspedes que se alojaban en las habitaciones del establecimiento situadas en la planta superior y para otros posibles clientes. La cocinera estaba calentando la parrilla cuando empezó a arder. Inmediatamente ella y la camarera arrojaron agua sobre el abrasador en un intento de apagar las llamas, pero éstas se extendieron con tal fuerza que el comedor y el bar se llenaron de humo, llegando hasta la planta superior, donde los huéspedes salieron precipitadamente.

Hasta el lugar del siniestro se desplazaron dos dotaciones del Parque de Bomberos de Benavente -que recibieron la llamada a las 20.55 horas-, con tres bomberos y dos camiones, que a su vez solicitaron apoyo de los bomberos voluntarios de Villalpando ya que por el camino les comunicaron que podía estar afectada la planta de las habitaciones.

Una vez en el lugar, los profesionales comprobaron que el fuego solamente afectaba a la parte del bar-comedor, en la planta baja. En concreto estaba concentrado en la parte del abrasador, mientras en la segunda planta solo estaban afectadas "unas cortinas y el falso techo debido a la radiación del calor" han confirmado fuentes de los bomberos. Pero todo el recinto se vio invadido por el humo.

El alcance de los daños obligó a desalojar el edificio y el negocio ha quedado inhabilitado y ayer era notable la presencia de curiosos que se acercaron a comprobar los efectos del fuego. Por la tarde las trabajadoras estaban a la espera de que llegaran los peritos para valorar los daños en el restaurante Oviedo que, por otro lado, no es el primer susto que sufre. En fechas anteriores ha sido objeto de robos en las máquinas tragaperras.

Se trata de un establecimiento conocido en la zona y de parada habitual de camioneros y conductores en general por su situación estratégica al lado de la N-630.