Vikingos y piratas se unen a bellas reinas y damas para dar inicio a las fiestas de la Virgen de la Asunción y San Roque de Venialbo.

La plaza mayor de la localidad se llenó de peñistas, que con sus uniformes, bailes y cantes dieron color y alegría a la celebración. Por unos días la crisis, los problemas del campo o las asignaturas pendientes, quedarán a un lado para dar paso a las verbenas y los encierros.

Las peñas «Los Inhumanos» y «Los Salvajes» fueron los encargados de dar el pregón para el pistoletazo de salida a los festejos. Las dos agrupaciones montaron una graciosa presentación, relacionada con el aniversario de los 15 años de fundación de ambas. Así, la peña «Los Inhumanos», vestidos de piratas, y «Los Salvajes», de vikingos, se echaron cosas en cara, todo en tono de humor, sobre las cosas que una peña había hecho a la otra durante estos años. Destacaron recuerdos como el día de la limonada, cuando «Los Inhumanos» hicieron de las escaleras de la peña amiga una cascada. «Y no queremos mencionar todas las penurias que nos han hecho pasar estos», añade un miembro de «Los Salvajes».

Pese a estas pequeñas rencillas, que ahora recuerdan con cariño, estas dos peñas quieren ser «el símbolo de unión entre todos los venialbenses», tal y como afirmaron en su discurso, haciendo juntos el pregón.

El sentimiento de reencuentro de estas fiestas también quedó patente durante su discurso: «amigos y vecinos tienen en esta tierra su punto de referencia», manifestaron. Y es que, durante estos días, las calles de Venialbo se llenan de personas, que nacieron, que vivieron en la localidad o que simplemente tienen un buen recuerdo de años anteriores, y que vuelven una vez más para disfrutar al máximo.

El alcalde de la localidad, Jesús Vara Colino, abogó, por su parte, en el discurso inicial durante la coronación de las reinas y damas por «la amistad, la convivencia y la tolerancia entre vecinos y forasteros que abarrotan estos días las calles del municipio».