Diez vecinos de la localidad de Villanueva del Campo se beneficiarán a partir del próximo lunes de los servicios del comedor social, que será inaugurado ese mismo día por el presidente de la Diputación Provincial, Fernando Martínez Maíllo.

El comedor social que está integrado en la residencia de ancianos “Don Rufino” ofrecerá comidas en sus instalaciones a todos los usuarios, menos uno que se le servirá en casa por «ser muy mayor y estar impedido», explicó el alcalde de Villanueva, Manuel Febrero.

La iniciativa ha sido puesta en funcionamiento por el Consistorio, el cual aprobó en Pleno la creación de un comedor social en el municipio cuyos precios serán sufragados, en parte, por las arcas municipales. La inauguración del servicio tendrá lugar el próximo lunes a cargo de Martínez Maíllo y en él participarán también varios alcaldes de la comarca, así como diputados. Después parte de los asistentes al acto y la Corporación Municipal participarán junto a los vecinos en la primera comida que se dispensa en las instalaciones, con «un menú sorpresa», prosigue Febrero.

Antes de la inauguración el presidente de la Institución Provincial mantendrá un breve encuentro con los alcaldes de la zona.

El comedor social de Villanueva del Campo dará servicio en la residencia a los jubilados, discapacitados y personas en paro que estén censadas en la localidad terracampina.

El precio de la comida se ha fijado en 6 euros, de los cuales, tres serán aportado por el propio Ayuntamiento y los otros tres por los usuarios del servicio. La prestación también es llevada a cabo a domicilio con un cargo adicional para el cliente de cincuenta céntimos.

Según las normas establecidas los vecinos utilizarán el comedor de la residencia “Don Rufino”, a partir de cinco personas se establecerían turnos y con menos se usaría conjuntamente con las personas que residen allí de forma permanente.

Febrero, explicó que la Corporación Municipal decidido a crear el servicio «porque en el pueblo hay mucha gente que está sola por muchas circunstancias, impedida y pensiones muy bajas. Además es una forma de que la gente mayor y no tan mayor se quede en el municipio y logramos una permanencia de la población . Además, se quedan en sus casas, comen adecuadamente y continúan relacionando con sus vecinos de siempre».