La Junta convocó ayer 232,5 millones de euros en ayudas directas para autónomos y empresas de 184 sectores para el pago de deudas y costes fijos ante el impacto de la crisis del COVID-19, que podrían beneficiar a 70.000 trabajadores por cuenta propia de la comunidad. El consejero de Economía y Hacienda del Gobierno regional, Carlos Fernández Carriedo, presentó la orden con las bases reguladores, que publica el Bocyl, de estos apoyos estatales que se pueden solicitar desde hoy mismo hasta el 6 de julio, de forma telemática a través del Instituto de Competitividad Empresarial (ICE).

Carriedo destacó que el Ejecutivo autonómico incluye en la orden 89 sectores más que los 95 propuestos por el Gobierno en el real decreto que regula estos fondos, e incluye explotaciones ganaderas, música, libros, peluquerías, autoescuelas o academias de enseñanza de idiomas, así como elaboración de vinos, quesos, pan y productos cárnicos. En concreto, la Junta ha añadido 37 sectores en comercio, 15 en turismo y cultura; otros tantos en agricultura y ganadería; ocho en servicios sociales; seis en educación y cultura; cinco en sanidad, y tres en otros servicios.

Carriedo destacó que en la Junta va al máximo que permite la regulación básica estatal en las ayudas a empresarios o profesionales de estimación objetiva de tributación por módulos en el IRPF, con 3.000 euros, que cobrarán de forma más ágil, al servir una declaración responsable y no tener que emitir Hacienda un informe de pérdidas.

Asimismo, se establece un importe inicial de 4.000 euros para el resto de empresarios y profesionales (estimación directa y resto), sin perjuicio de que se pueda incrementar si hubiera crédito disponible, pero el Ejecutivo “atenderá especialmente a pequeños autónomos, empresarios y profesionales”. No obstante, en ningún caso se podrá percibir más de 200.000 euros. Estos apoyos también pueden beneficiar a grupos y empresas con facturación superior a diez millones.