El Grupo Socialista arrebató ayer a Ciudadanos la Presidencia de la comisión de investigación de las eólicas, el edificio de Arroyo de la Encomienda, los terrenos de Portillo y las sedes en el exterior al convertir en presidenta a la zamorana Ana Sánchez, en sustitución del burgalés José Ignacio Delgado, que renunció el 11 de marzo al cargo por enfermar de COVID-19 y ser hospitalizado.

En la reunión de este jueves de la comisión se abordó la elección del presidente, con la presentación de la candidatura de Ana Sánchez y José Ignacio Delgado, que empataron en votos, por lo que se deshizo con el voto ponderado de los socialistas, que son el grupo mayoritario en la cámara.

Tras resultar elegida, la socialista Ana Sánchez, vicepresidenta segunda de las Cortes y secretaria de Organización del PSCyL, insistió en que su intención es que se sepa “todo” lo ocurrido, a su juicio, con las tramas de corrupción del PP de Castilla y León durante décadas y anunció una reestructuración del calendario de comparecientes y la posibilidad de cambiar el orden o de citar de nuevo al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y al consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo.

Ana Sánchez sostuvo que la comisión no está “finiquitada”, como recordó afirmar el anterior presidente, y remarcó que a partir de ahora empieza de “verdad” a trabajar y garantizó que ahora sí se va a investigar. Además, rechazó las críticas por aprovechar la renuncia del anterior presidente tras haberse contagiado, ya que indicó el cupo de “ruindad” lo han cubierto ya los dos socios de gobierno y recordó que el burgalés mantuvo íntegros, pese a su estado, sus derechos como parlamentario, lo que le permitió votar en la moción de censura.

El vicepresidente y portavoz de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, censuraba “la catadura moral” de la oposición socialista por haber aprovechado la enfermedad y el transfuguismo para hacerse con la presidencia de la comisión de investigación de las eólicas.

La oposición, salvo Vox, pide conocer qué pasó en las residencias

El grupo parlamentario socialista, los procuradores del grupo mixto –a excepción de la representante de Vox–y la diputada no adscrita María Montero registraban ayer la petición de la comisión de investigación sobre lo sucedido en las residencias durante la primera ola del COVID, que probablemente saldrá adelante tras perder la mayoría en las Cortes PP y Ciudadanos. La petición está firmada por los procuradores del PSOE, Podemos, UPL, Por Ávila y la no adscrita María Montero, que suman 40 apoyos, a uno de la mayoría, aunque el portavoz de los socialistas, Luis Tudanca, y la procuradora de Podemos Laura Domínguez han recordado en rueda de prensa que Vox ya votó a favor de crear dicha comisión. Por su parte, Vox ha emitido un comunicado en el que recuerda que esta formación fue la primera en defender la comisión de investigación de lo sucedido los primeros meses en las residencias de mayores en Castilla y León y califican de “enternecedor” ver a Tudanca mendigando el voto de Vox después de afirmar que jamás aceptaría su voto para nada. “Estudiaremos los términos en los que el PSOE propone la comisión de investigación, si nos llega, ya que su anterior propuesta ( rechazada por PP y Cs) ni siquiera nos fue presentada”, indica Vox en la nota.