Agentes de la Guardia Civil investigan a dos hombres, pertenecientes a una empresa de construcción de Toledo, por verter restos de fibrocemento de una obra en una finca rústica del norte de Palencia. Los residuos producidos, catalogados como tóxicos y peligrosos al contener amianto, con un peso de 1,5 toneladas, fueron vertidos en una parcela en lugar de ser entregados a un gestor autorizado, según fuentes del instituto armado.

La empresa de construcción investigada carecía de las correspondientes autorizaciones para realizar trabajos con amianto y gestionar residuos tóxicos, llegando incluso a cobrar al promotor de la obra por la gestión del residuo sin realizarlo. Para ocultar esta gestión irregular formalizaron un falso certificado de entrega del amianto a un gestor de residuos ubicado en Madrid para intentar ocultar esta gestión.