Las farmacias de Castilla y León, desde que en 2010 empezaran a realizar los primeros test rápidos de VIH, han detectado ya 103 posibles casos positivos de un total de 8.465 test realizados, tal y como subraya el Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de la Comunidad con motivo de celebrarse mañana sábado el Día Mundial del Sida.

En la comunidad son 16 las boticas que ofrecen este servicio, distribuidas de la siguiente manera: Ávila 1; Burgos 2; León 3 (2 en la capital y 1 en Ponferrada); Palencia 1; Salamanca 3; Segovia 1; Soria 1; Valladolid 3, y Zamora 1.

A diferencia de los autotest en domicilio, el programa que de forma pionera funciona en Castilla y León desde 2010 incorpora toda una cadena de protocolos sanitarios que el farmacéutico pone en marcha cuando un paciente así lo requiere.

De hecho, tras detectarse un posible positivo en la farmacia, ese ciudadano recibirá, si así lo desea, asesoramiento pormenorizado sobre los recursos disponibles en materia de VIH y podrá ser derivado al sistema sanitario.

La información recogida por el farmacéutico, que incluye referencias a prácticas de riesgo, será clave para que las autoridades sanitarias puedan trabajar en futuros planes de detección y prevención de la enfermedad.

Las boticas constituyen un punto de atención sanitaria cercano al paciente, de ahí que muchos opten por este servicio, de carácter anónimo, por la accesibilidad, rapidez y amplio asesoramiento.

La realización de estos test rápidos de detección de VIH en las farmacias de la Comunidad es fruto de un convenio de colaboración entre la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León y el Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León (Concyl).