Sanidad

Burganes, Olmillos y Bretocino de Valverde compran a escote un electrocardiógrafo para sus vecinos

Los tres ayuntamientos costean al alimón el aparato para evitar desplazamientos de mayores a Benavente

Una enfermera prueba el nuevo electrocardiógrafo portátil en el consultorio de Olmillos de Valverde.

Una enfermera prueba el nuevo electrocardiógrafo portátil en el consultorio de Olmillos de Valverde. / J. A. G.

Los ayuntamientos de Burganes, Bretocino y Olmillos de Valverde han adquirido a escote un electrocardiógrafo portátil para mejorar las prestaciones sanitarias de los pacientes de sus tres consultorios médicos y evitar, fundamentalmente, los desplazamientos de mayores a Benavente.

Unos 825 vecinos de las tres localidades se beneficiarán de la adquisición de este aparato, que irá rotando de consultorio en consultorio aprovechando que cada localidad programa las consultas médicas y de enfermería en días diferentes.

Los tres ayuntamientos han invertido 1.500 euros en la compra en Benavente de este electrocardiógrafo que permitirá realizar electrocardiogramas en caso de necesidad y dispone de un maletín protector de transporte para su traslado entre los tres consultorios médicos.

Primera iniciativa

San Cristóbal de Entreviñas, en 2022 fue el primer Ayuntamiento de la comarca en emplear fondos municipales para la dotación de un electrocardiógrafo pese a que las competencias sanitarias corresponden a la Junta de Castilla y León. De este aparato carecen los consultorios médicos. Cuando se necesita realizar una prueba, los pacientes tienen que trasladarse a los centros de salud de Benavente o al Hospital.

En el caso de Burganes de Valverde, Olmillos y Bretocino, el hecho de que solo haya transporte público los jueves reduce las posibilidades de que personas mayores puedan trasladarse cuando no tienen vehículo o nadie que les pueda llevar.

La constatación de esta realidad animó al alcalde de Burganes, Christofer Ferrero, a plantear la posibilidad de adquirir el aparato junto a Olmillos, municipio pedáneo, y también con la localidad vecina de Bretocino. Los tres consultorios tienen en común los mismos sanitarios. Cada ayuntamiento ha aportado 500 euros para la compra. 

«Hay gente mayor que no puede conducir o que no tiene la posibilidad de que la lleven a Benavente, y solo hay transporte público los jueves. Si se necesita realizar una prueba como esta tienen que desplazarse. De esta manera superamos esta dificultad», explica.

Este alcalde cree que la Junta de Castilla y León debería valorar la dotación de este tipo de aparatos en los consultorios médicos. «No digo en todos, pero sí en aquellos que comparten en las consultas médicos y enfermeras. Sería una manera de rentabilizar su uso».

Esto es lo que se pretende en estas tres localidades. El aparato estará con carácter general en Olmillos, a medio camino entre las tres poblaciones, pero se trasladará cuando se necesite a cada consultorio o, "en caso de necesidad, se irá a buscar". 

«Si en otras localidades cercanas lo necesitan, podrán usarlo también», ofrece Ferrero, que inicialmente valoró la posibilidad de que el ámbito de acción del uso del electrocardiógrafo fuese más amplio.