La Vía del Canal verá ampliado su espacio público con la incorporación de las parcelas resultantes de la expropiación y demolición de dos edificios que se encuentran fuera de ordenación desde la aprobación definitiva del Plan General de Ordenación Urbana en el año 2007.
Se trata de una vivienda baja con patio interior que ocupa en número 112 de la Vía del Canal, abandonada y deteriorada, y convertida en su interior en un foco de basura; y de una nave almacén localizada en el cruce con la carretera de Los Salados, en los números 142-146.
La primera ocupa una parcela de 251 metros cuadrados; la segunda de 336.
La Junta de Gobierno Local aprobará en su próxima reunión los expedientes expropiatorios que llevan tramitándose desde el pasado mes de abril a petición de los propietarios.
Los dueños de la vivienda de planta baja próxima a las Casas de la Ría han solicitado la expropiación total de la finca “por resultar antieconómica la conservación de la porción no califica como sistema viario local”.
El Plan General de Ordenación Urbana de Benavente califica una porción de la parcela de 219 metros cuadrados como calle y el resto, de 32 metros cuadrados de superficie como suelo urbano consolidado. La finca se ha tasado en 13.788 euros.
En el caso de la nave almacén, de cinco metros de altura, los propietarios han considerado igualmente antieconómica la conservación de la porción no calificada como sistema viario local.
Una porción de la finca, de 282 metros cuadrados en concreto, está calificada como sistema viario local en el Plan General de Ordenación Urbana. Los 54 metros cuadrados restantes tienen la condición de suelo urbano consolidado y está sometida a la Ordenanza de Edificación en manzana cerrada.
El proyecto de expropiación se está tramitando por el procedimiento de tasación conjunta. El valor de tasación asciende a 68.846 euros.
En este caso, se produjo hace una década una propuesta de permuta del Ayuntamiento a los propietarios con un solar del polígono industrial de Benavente II. La operación resultó fallida porque sobre ese solar cruzaba una línea de alta tensión que hacía inviable la edificación.
La actual Administración local inició las negociaciones con los propietarios en 2020, coincidiendo también con la compra obligada del terreno posterior a las Casas de la Ría por el que una empresa que decía ser la propietaria del suelo reclamaba 315.000 euros.
Tras iniciarse la expropiación forzosa los servicios jurídicos municipales desestimaron las alegaciones de la empresa tasando en algo más de 80.000 euros de los 391 metros cuadrados de la finca.
Las tres acciones expropiatorias aportan a la Vía del Canal 1.000 metros cuadrados de espacios públicos, que en el caso de la parte posterior de las Casas de la Ría serán reacondicionados.
