Una mujer condenada por los juzgados de Benavente a una pena de multa de 720 euros por un delito leve de usurpación al ocupar en la ciudad una casa que no era suya, tendrá que desalojar la vivienda e indemnizar al propietario, que reside fuera de Benavente, por los daños causados al forzar la cerradura para acceder a su interior y luego cambiarla por otra.
La Audiencia Provincial de Zamora ha estimado parcialmente el recurso de apelación del propietario modificando la sentencia del Juzgado de Benavente que, aunque condenó a la mujer por el citado delito leve de usurpación, sentenció que el desalojo no era procedente.
Esta sentencia se basó en una ampliación del atestado inicial de la Guardia Civil en la que, tras una comunicación de dos personas no identificadas, agentes del cuerpo se personaron en la casa y se encontraron con un hombre que aseguró que la encausada le permitía estar allí a cambio de 150 euros.
Los magistrados de la Audiencia Provincial de Zamora entienden que la mujer que había ocupado la casa sin autorización del propietario, seguía ostentando la posesión del inmueble cediéndosela a otra persona.
La Audiencia estima también la petición del propietario de fijar una indemnización por los daños causados, un extremo que la encausada admitió reconociendo que había forzado la cerradura y la había cambiado por otra nueva. Por ello tendrá que, además de abandonar la casa, abonar los daños causados por forzar y cambiar la cerradura.
