Buenas sensaciones en la XXII Feria del Libro de Benavente este año. Aunque las ventas han sido “modestas”, en palabras de distintas librerías participantes, aseguran que el ambiente, el contacto con el público, la animación de la gente por conocer libros y lecturas de todo tipo hacen que el balance de estos tres días de feria sean positivo. “Teníamos ganas de salir a la calle, de volver a las ferias, y la gente también”, explicaban ayer.
El escritor, librero, gestor cultural y editor, Luis María Compés, quien además preside la Asociación de Escritores de Madrid, explicaba ayer que “llevo diez años viniendo a esta feria y este año observo mejor ambiente que nunca. El público está muy receptivo y las ventas son aceptables”, aseguraba. “Los escritores teníamos muchas ganas de salir. La pandemia ha sido muy dura para nosotros. Aunque el acto de escribir es un acto de soledad, los libros no cobran vida hasta que no llega a los lectores. A nosotros, que nos gusta firmar en las ferias y viajar por toda a España, nos ha costado. Ahora vemos que sigue habiendo buen ambiente. Las ferias es el lugar idóneo”.
Al referirse a la Feria de Benavente subraya que “es una feria donde se vive realmente que tanto escritor, libreros y público se siente a gusto, nos miman”.
En la feria de este año, que se ha renunciado a poner el expositor institucional para dar cabida a más libreros y editoriales, ha habido gente que acudía por primera vez a la feria con algo de “miedo”, explica el responsable de la librería salmantina Maldonado y con ganas de aprender. Otras cinco librerías también han estado presentes: Mimares, Maxtor, Notting Hill y la benaventana Librería Futura, que un año más ha apostado por apoyar esta feria. Así como tulibreriadesiempre.es.
En la Librería Notting Hill han presentado sus libros varios autores como el poeta Enrique Rodríguez Romera quien explicaba que “hay que volver a coger el pulso a las letras. Que siga habiendo ferias es muy importante para los autores, pero para el público en general también porque eso anima a la lectura”. Enrique mostraba al público su libro “18 credenciales”, presentado en concursos y certámenes poéticos; “Trobador y poeta”, de poesía personal, vivida y sufrida y llevada a papel que va por la quinta edición; “y para niños de entre seis y doce años he desarrollado “Santi”, un libro especial, con fotos reales, en el que un niño puesto en mi pluma va sacando a relucir cosas que les atañe a los niños”.
También la escritora Val Marchante presentó su libro en la feria “Esencia que el viento dispersa”. Marchante explicaba que “en la feria la gente vuelve a encontrarse con la cultura, nosotros le mostramos los libros, las ilustraciones, la gente está muy animada, tiene necesidad de cultura”.
En la feria ha habido representación de la Asociación de Escritores de Madrid y de Ledo del Pozo, así como de varias editoriales: Aache, Rimpego, Mariposa Ediciones, Lobo Sapiens Editorial, Editorial Cultural Norte o Editorial Palabras de Agua. Escritores como Ana Coto, Isabel Álvarez o Mariana Barrios han disfrutado en Benavente con el contacto con el público y han mostrado sus obras a la gente interesada por conocer algo más de sus libros.
La feria ha contado con actividades complementarias como el taller de animación a la lectura y la escritura realizado por Compés, con gran participación. Él explicaba que “el tiempo de pandemia ha favorecido a esas grandes plataformas que te llevan todo a casa. Pero el que acude a una feria puede llevarse el libro dedicado. Nos complementamos y todos tenemos que subsistir”.
Hoy tendrá lugar el Día de la Biblioteca en la Feria del Libro con cuentacuentos a las 12:30 horas y lectura en alto por los niños del libro de “Nina y el rizo de la suerte” presentado ayer. Habrá también sorteo de libros.
