E. Ponte

"Socializar la artesanía, hacerla más cercana" es el principal objetivo del "II Encuentro de Torneros' celebrado durante el fin de semana en Santa Colomba de las Monjas que ha logrado reunir a cerca de un millar de visitantes, según explica la organización. "Esta iniciativa persigue mostrarle a la gente que los artesanos no somos bichos raros que nos encerramos en casa y no tenemos cercanía a la gente. Este evento nos sirve para abrir la puerta y que la gente vea el talento creativo que hay en esta comarca", señaló Alfredo Fernández, presidente de la Asociación de Ocio y Tiempo Libre Contornos Aficiones Creativas, de Santa Cristina de la Polvorosa, promotora de la iniciativa.

En el encuentro se han dado cita un total de dieciocho artesanos de diferentes puntos de la geografía nacional como León, Vitoria, Madrid, Guadalajara y gente de Benavente y la comarca de Los Valles. En el recorrido por la exposición, con la que ha colaborado el Ayuntamiento de Santa Colomba de las Monjas, han mostrado artículos y artículos de tornería creativa, piezas de talla en madera, otras de pirograbado creativo, técnica de texturizado y ebonizado e ingeniería creativa aplicada al torno.

Hernán, un veterano de Quintanilla del Monte y 88 años de edad, mostraba réplicas en madera de perdices metidas en jaula y réplicas de herramientas, o maquetas de encofrados. También el benaventano José Ángel Llamas ha acompañado a la asociación con sus piezas únicas de talla de madera. Mientras que Andrés Rodríguez, de Camarzana de Tera, también ha estado presente con sus piezas realizadas a base de mimbre franciscana.

Los expositores aprovecharon también para compartir experiencias. "Algunos artesanos nos enseñaron otro modo de hacer las cosas como Roberto del Rosal, de Asturias, que utilizaba dos útiles que acoplados al torno dan mayor versatilidad a las piezas". Mientras que los alumnos de la asociación de Santa Cristina acercaron también las piezas realizadas en el curso que se clausuró en este encuentro con entrega de diplomas.

Las altas temperaturas no echaron para atrás a los visitantes, según explica la organización, y hubo afluencia constante, destacando la presencia de gente del entorno y de la Sierra de la Culebra. Los niños pudieron practicar a realizar peones de madera con el torno.