La localidad de San Cristóbal de Entreviñas organizó en la mañana de ayer un encierro campero en el que participaron más de 150 caballistas y un numeroso público. Una buena parte dentro de los coches por precaución. La suelta de dos toros por el campo de secano procuró las delicias de los aficionados y del público en general. Otra vez volvió a demostrarse que los festejos taurinos atraen la atención de numerosos aficionados que se desplazaron hasta San Cristóbal de Entreviñas desde diversos puntos de la provincia.