La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha dado la razón a un bombero despedido por el Ayuntamiento de Benavente, ha validado la sentencia dictada por el Juzgado de lo Social número 2 de Zamora número 1 de Zamora, y ha desestimado el recurso del Ayuntamiento al que ha impuesto 400 euros de costas.

El trabajador despedido fue contratado mediante un contrato de obra o servicio determinado de fecha 1 de mayo de 2015 para vacaciones de la temporada estival del año 2015 y fue dado de baja por conclusión de la obra en fecha 5 de Marzo de 2016. Durante ese tiempo sustituyó a diversos compañeros durante las vacaciones de éstos e incluso durante la baja por paternidad de un compañero.

Pese la modalidad del contrato, el alto tribunal considera que se superó ampliamente el tiempo por el que fue contratado y adquirió la condición de indefinido, razón por la que refrenda la improcedencia del despido.

El Ayuntamiento, que ya abonó 396 euros de finiquito al trabajador, descarta la readmisión y le indemnizará ahora tras esta sentencia con otros 1.200 euros.