Izquierda Unida calificó ayer el mecanismo de financiación para el pago a proveedores fijado por el Gobierno de «chantaje intervencionista». IU cree que la citada línea de pago a proveedores deja a los ayuntamientos «intervenidos económica y políticamente» y califica de «robo encubierto» que el Gobierno «de el dinero a los bancos para que estos se lo presten a los ayuntamientos cuatro o cinco veces más caro».

IU se pregunta en el caso del Ayuntamiento de Benavente «de cuánto tiempo dispondrían las arcas municipales para devolver esa cantidad a los bancos que entren en el sistema y cuantos intereses tendrá que pagar por tal adelanto», y recuerda que la Ley sólo permite contratar con los bancos préstamos a corto plazo que no superen el 30% de los ingresos corrientes.

«Para el ayuntamiento de Benavente las cosas no están nada claras, y desde luego no van a mejorar con las medidas del gobierno. Puede, incluso, que hasta puedan empeorar. Para los proveedores, la media del Gobierno será buena y positiva en función de cuánto estén dispuestos a perder», considera IU que estima que de los tres millones de euros que se deben a las arcas municipales «en torno al millón de euros el Ayuntamiento no llegará a cobrarlo», razón por la que considera que la situación económica municipal «no es tan idílica».