La Junta de Castilla y León ha rechazado que las decisiones en materia laboral de la empresa concesionaria de la Estación de Autobuses conlleven una «merma» de los servicios que se prestan en la terminal de pasajeros. Así lo aseguró el alcalde de Benavente, Saturnino Mañanes, tras conversar con la Delegación Territorial y con la Dirección General de Transportes. «No peligra la estación ni los servicios», adujo Mañanes. La concesionaria ha notificado el despido a los siete trabajadores y prevé arrendar la cafetería y con ella los servicios de consigna, limpieza, información y facturación.