Fahmi Alqhai desprende exotismo por sus orígenes, que mezcla con un marcado y alegre acento andaluz. En esta entrevista presenta el concierto "Muera Cupido", que abre el Pórtico de Zamora el próximo viernes, en la iglesia de San Cipriano (21.00 horas), con su grupo Accademia del Piacere y la soprano Nuria Rial. Por cierto, que el Festival comienza hoy a comercializar las entradas sueltas para los conciertos, aunque el ritmo de venta de los abonos ha sido, como de costumbre, muy veloz. La información para la adquisición de los pases se encuentra en la web del ciclo, www.porticozamora.es.

- Háblenos de sus orígenes familiares.

-Mi padre es sirio, mi madre es palestina y yo nací en Sevilla, aunque he estado mucho tiempo en Siria viviendo.

- ¿Dónde nace su fascinación por la música?

-En la familia de mi madre, que es muy extensa y vive en Haifa, hay muchos músicos, algunos de ellos muy conocidos en aquella zona de Siria. La vocación me vino de muy chico, daba clase de piano con las monjas y ahí nació todo.

- Y entre aquellas experiencias iniciales a la viola da gamba, hay un trecho temporal?

-Pasan prácticamente diez años hasta que me encuentro con la viola. Fue algo completamente casual. En Sevilla, entró en el rock y en el heavy como guitarrista eléctrico. Un amigo del grupo vio que tenía facilidad y me aconsejó que me apuntara al conservatorio para aprender. Allí, el único instrumento que tenía plaza era la viola da gamba, el primer año que se ofrecía la formación en un conservatorio español. Y hasta hoy.

- Jordi Savall suele decir que la viola es su instrumento preferido porque es el que más se parece a la voz humana?

-Es un instrumento con muchas posibilidades que se puede asemejar a la voz humana igual que a otras cosas. Quizá sea poco romántico, pero los instrumentos son "instrumentos". Detrás siempre hay un músico. Para mí la viola es fácil y lo que más valoro son las alternativas que ofrece.

- ¿Cómo surge la fundación de su grupo Accademia del Piacere?

-Accademia nace en Italia, cuando estaba acabando mis estudios allí, sobre el año 2000. El primer concierto fue en abril de 2002 en Sevilla. El grupo fue desarrollándose, aunque los tres que empezamos seguimos ahí. Hay un núcleo duro. Se puede parecer a un grupo de rock en este sentido. Hemos conseguido un sello, un sonido, una forma de interpretar. Esto no se concibió como grupo de "freelance", sino un formato con el que nos sentimos muy a gusto.

- Y han grabado discos novedosos y atrevidos como "Rediscovering Spain" que les han dado muchas alegrías, ¿verdad?

-Lo que hemos intentado siempre es respetar nuestros gustos personales, sin ser ajenos al mundo que vivimos. No tenemos miedo a hacer nuestra música, siempre dentro de unas reglas. En "Rediscovering Spain", como cita, tenemos que seguir unas pautas, no podemos hacer lo que nos dé la gana. Lo que hicimos fue trabajar como lo hacían los instrumentistas del siglo XVI. Coger las canciones que a la gente le gustaban en los palacios y calles y transformarlas. Lleva sonando desde hace años, con varios premios a las espaldas y conciertos por lugares como Estados Unidos, Sudamérica y ahora, en noviembre, Japón.

- Y en el que colabora una artista que conocemos bien en Zamora, Raquel Andueza?

-Yo tenía muchas ganas de trabajar con Raquel y la llamamos para grabar el disco. Siempre se nos quedó en el tintero hacer el programa en directo con ella. Espero que tengamos esa oportunidad. Así que siempre lo hacemos instrumental, pero lo cierto es que nació así y a última hora decidimos darle el toque de Raquel.

- Conoce Zamora, vino hace años al Pórtico de Zamora para interpretar sonatas de Bach en Morales del Vino y ahora regresa con su grupo, ¿será diferente?

-El Pórtico es uno de los festivales grandes de la música antigua en España. Para Accademia del Piacere, que siempre apostamos por trabajar aquí, es una grata oportunidad. Estar en Zamora es una maravilla, mucho más interesante que coger aviones para ir fuera.

- Y vienen a San Cipriano, templo talismán del Pórtico, ¿cómo será el programa?

-Un programa muy bonito, llamado "Muera Cupido", que hacemos con Nuria Rial, número uno en el ámbito mundial.

- Háblenos un poco más de la cantante Nuria Rial.

-Con Nuria trabajé desde chico, cruzamos los caminos con veinte años, con José Miguel Moreno en Orphenica Lyra. Coincidimos estudiando en Basilea. Siempre ha sido para mí la soprano, tiene una de las voces que más me maravilla. Los primeros ensayos nos sentimos con el alma llena. Un lujo, en definitiva. Ahora grabamos para Sony Classic, el sello más importante en música clásica. Estamos realmente muy contentos.

- Desprende optimismo de su trayectoria y de la de Accademia, ¿no notan las dificultades que afectan al mundo de la cultura en nuestro país?

-El panorama es complicado, el arte nunca ha sido algo sencillo. Nosotros no podemos quejarnos. Desde que arrancó Accademia ha ido año tras año subiendo y ahora estamos asentados entre los cincuenta y sesenta conciertos anuales, un dato muy bueno. Firmo seguir así. Al final, somos una empresa con una oficina, cada vez más grande.