Catorce empresarios del sector turismo de Zamora reivindican "más iniciativas" que pongan en común las esferas público y privada, similares a las que impulsó ayer la Diputación zamorana en Orense. Allí compartieron experiencias con una veintena de empresas gallegas para difundir su infraestructura de cara a dar cobertura a posibles turistas. Hoteles como Juan II de Toro, Casa Aurelia de Villaralbo, NH Palacio del Duero, María de Molina, Valbusenda y Los Cuerros, así como empresas de turismo activo como Aherca Tras la Huella del Lobo, Turma, El sabor del Vintage, Naturaliste y Zamora Natural se promocionaron en Orense, hasta donde también acudieron las bodegas La Viña del Abuelo de Toro, el camping Sierra de la Culebra y las queserías Chillón de Toro.

Tras el encuentro de trabajo, el director del NH, Eduardo Peña, reconoció "la relevancia del apoyo institucional", en la misma línea de Feliciano de la Calle, del hotel María de Molina, que puso el énfasis en la importancia de "sumar esfuerzos" tras abrir canales de comunicación con algunas agencias de Orense. La sesión de trabajo, que se prolongó durante más de una hora en el centro cultural Marcos Valcárcel sirvió, sobre todo, "para sembrar, ya veremos cuándo recogemos", ejemplificaba Sonia González, gerente de Turma. Ante este caldo de cultivo, "la interprovincialidad" se presenta como baza clave en la difusión turística de Zamora, según confirmó Enrique Laorden, del camping Sierra de la Culebra. Sin embargo, la base de cualquier negocio se sostiene con "ilusión, optimismo y energía", razonaba Fernando Mullor, propietario del hotel rural Santa Cruz, de Santa Cruz de los Cuérragos. El profesional insistió en que Zamora "no tiene nada que envidiar a ninguna provincia", para desterrar la idea de que "es la gran olvidada y La Carballeda, la hermana pobre de Sanabria". La tradición llegó de la mano de Teodolindo Chillón y sus queserías, con 125 años de historia. El empresario ahondó en que "la promoción es el dinero mejor gastado por las instituciones".