"Dosta", es decir, "Basta ya" en romanés. Es el grito de la comunidad gitana para reivindicar la plena ciudadanía del colectivo y la huida de los estereotipos. Dos retos en los que está embarcada la Fundación del Secretariado Gitano de Zamora, que celebró ayer el Día Internacional del Pueblo. "Un buen día", como planteó el autor Manuel Rivas en el manifiesto de este año, "para acabar con la suspensión de las conciencias, para limpiar las miradas de prejuicios y el lenguaje de mezquindades, para poner freno a las injusticias que suponen una derrota de la humanidad", reza el manifiesto, leído ayer también en Zamora para conmemorar ese 1971, en Londres, cuando se instituyeron la bandera y el himno gitanos. El texto sirvió para evidenciar que "la atmósfera está todavía contaminada de racismo, al igual que el lenguaje lo está por formas de xenofobia", denunciaba el manifiesto, que aludía también a una "mirada profunda a un pueblo maltratado, perseguido casi sin descanso, sin poder tomar aliento, a veces hasta el límite...".

Un año más, Zamora se suma a la celebración junto a la Fundación Secretariado Gitano, Ayuntamiento, Centro Menesianos Zamora Joven y Cruz Roja, en colaboración con la Asociación de Vecinos de Olivares, Multicines Zamora y el merendero de Las Espadañas. La celebración ha supuesto en los últimos años una importante ocasión para el reconocimiento de los gitanos, su historia, su lengua y su cultura. Si bien durante un tiempo fue una celebración que pasaba desapercibida, en la actualidad es conmemorada en Zamora y en cientos de ciudades más de los cinco continentes como "una llamada de atención a la discriminación que, en muchas ocasiones, sufre todavía esta comunidad", apuntan desde el Secretariado Gitano.

Poesía, cuentos, magia y la tradicional ceremonia del río desde el nuevo puente con la que la comunidad arroja flores naturales al río en recuerdo de los antepasados son algunas de las actividades protagonizadas por la comunidad gitana de Zamora. "Los ojos de la interculturalidad" es el título del concurso de dibujo desarrollado en diferentes centros escolares de Zamora y que tienen como escenario perfecto el Puente de Piedra, en el que ayer prendían los dibujos escolares. Parrillada, degustación gastronómica y entrega de premios para los ganadores de los concursos sirvieron para poner el punto y final a una jornada que fue mucho más que una conmemoración. Es la voz en alto de una comunidad que reivindica "lo mucho que queda por hacer para alcanzar la plena ciudadanía de la comunidad gitana".