Zamora y los pueblos más cercanos son las únicas áreas cercanas a capitales de provincia que han perdido habitantes en la última década, según los datos recogidos en los padrones elaborados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

De esta manera, en 2002 residían en la capital o muy cerca de ella más de 72.000 personas, cifra que se ha visto reducida hasta poco más de 71.600 en la última década. Las diferencias no son muy grandes, pero todas las demás capitales de provincia de la región registran ahora más habitantes censados que a principios de 2002.

Por su parte, los pueblos de la provincia han perdido durante la última década más de 7.000 habitantes, número éste que no se ha trasladado a la capital, por lo que es de suponer que son personas que han abandonado la provincia. En concreto, se ha pasado en los últimos diez años de 128.675 habitantes en zonas rurales a 121.729.

Zamora se encuentra en el grupo de cuatro provincias regionales en las que actualmente reside más gente en el medio rural que en el urbano. En concreto, tan solo el 37% de los habitantes de la provincia se encuentran empadronados en la capital, único núcleo urbano que el INE contempla en la provincia a efectos de la estadística.

Además, lejos de la tendencia general que indica que cada vez son más las personas que abandonan el campo para residir en la ciudad, en la provincia de Zamora hay más porcentaje de población en las zonas rurales en la actualidad que hace una década. Dentro de Castilla y León, solamente la provincia de Ávila tiene menos porcentaje de población urbana que Zamora, con sólo un 33%. Valladolid es la provincia que se sitúa en el otro extremo del ranking, con un 80,7%.

Lejos de lo experimentado en Zamora, los datos regionales indican que cada vez hay más población en las ciudades y sus entornos. En 2011 vivían en estos núcleos urbanos algo más del 62% de los habitantes de la región, lo que equivale a 1,58 millones de personas. Este porcentaje es más de 3 puntos superior al de hace una década.

Si se habla en términos regionales, el trasvase de ciudadanos del medio rural al urbano fue progresivo y continuo durante esta década, con la única excepción de dos descensos muy leves en 2007 y 2010, recuperados rápidamente en los años sucesivos, y no se ha visto interrumpido ni por la grave crisis económica actual.