«Tercermundista». Era el calificativo más repetido tanto por los propios afectados como por profesionales independientes a la hora de calificar el modo elegido para confeccionar las listas de sustituciones para las enfermeras. En resumen, quien primero llegara, primero se colocaba en la lista, sin tener en cuenta ni un solo factor objetivo para determinar el orden de los aspirantes, como se hace en otras comunidades con, por ejemplo, el expediente académico. El colmo del despropósito llegaba una hora antes de la apertura oficial de los distintos registros administrativos, a las nueve de la mañana, cuando el mayor núcleo de aspirantes, que habían pasado la noche frente a las oficinas de Sacyl en Príncipe de Asturias en busca de las mejores plazas, se enteraron de que los compañeros que habían optado por desplazarse a la Subdelegación del Gobierno habían tenido más suerte y habían podido presentar los papeles a partir de las ocho de la mañana. Simplemente, el registro de la sede gubernativa abría antes. Ante la presión de la cola, Sacyl tampoco esperó hasta la hora oficial y a las nueve menos diez de la mañana empezó a recoger solicitudes de los convocados en el lugar. Este fue el punto con mayor demanda, aunque algunos aspirantes optaron por utilizar otros registros administrativos, admitidos legalmente, en los que se encontraron menos cola o prácticamente ninguna, como ocurrió a los que se desplazaron hasta el edificio de Sanidad en la plaza de Alemania.

El asunto tiene su miga, ya que ocupar un puesto u otro en la denominada «lista cero», obligatoria para los titulados en los últimos tres años, ya que no han tenido acceso a oposiciones porque no se han convocado, puede suponer ser llamado para alguna sustitución o quedarse sin trabajo durante los últimos años. Y el requisito para ocupar un puesto u otro es haber registrado antes la solicitud, sin tener en cuenta ni expediente académico, ni méritos, ni experiencia laboral ni ninguna otra circunstancia.

Zamora no fue el único lugar donde los aspirantes pasaron la noche en la cola y en otras localidades de la región como Burgos, León, Salamanca o Ponferrada, pasó tres cuartos de lo mismo.

Este diario intentó recabar la opinión de los responsables de Sacyl en la provincia, aunque como era una convocatoria regional se remitieron a Valladolid, donde a su vez remitieron a este diario a unas declaraciones realizadas por la directora general a Radio Nacional en las que subrayó la agilidad de los registros para atender la demanda de solicitudes, resueltas en muy poco tiempo.

Los aspirantes de Zamora explicaron que el pasado miércoles acudieron a la Gerencia y observaron que había gente echando la solicitud para la «lista cero», aunque los funcionarios les aseguraron que sólo valían la solicitudes presentadas a partir de las nueve de la mañana del día siguiente. Por eso se decidieron a montar guardia, sin percatarse de que la Subdelegación del Gobierno habría antes de las nueve el registro: «Ahora se lava todo el mundo las manos. Es una injusticia grande porque llevamos tres años sin oposiciones y nos tememos que vaya para largo».