La sede toresana de la Asociación Española Contra el Cáncer organizó el pasado viernes la conferencia "La leche, naturalmente de la madre" de la mano de Magdalena Espinosa, enfermera en el servicio de Pediatría y Neonatos del hospital Virgen de la Concha. Durante la charla, a la que acudieron varias mujeres de la localidad, se abordaron las principales cuestiones sobre la lactancia materna en niños recién nacidos.

Durante la sesión Magdalena Espinosa reincidió constantemente en los beneficios que presenta la leche materna frente a los preparados para biberón. Según Espinosa, "numerosos estudios han certificado que hay una relación de bastantes alergias, intolerancias y problemas de piel relacionados con los biberones frente a la leche de la madre". La enfermera afirma que muchas veces los productos sustitutivos de la leche están demasiado enriquecidos lo que hace que los niños engorden más de la cuenta.

Este tipo de charlas no solo se dan solo en asociaciones como esta, sino que también se están empezando a implementar en el servicio de Pediatría y Neonatos del hospital zamorano. La intención es "concienciar a las madres para que estén tranquilas y confíen en su propia leche", señala Espinosa. La profesional de la salud explica que las primerizas se encuentran algo nerviosas durante las primeras semanas e intentan hacerlo "todo deprisa y corriendo". Tal y como asevera Espinosa "en la mayoría de los casos la leche materna es más que suficiente".

Poco peso

Igualmente hay casos en los que la leche materna no es suficiente o que la madre no posee la cantidad de alimento necesario para su hijo. Ante estas cuestiones Espinosa detalla que en gran medida "depende de las veces que pongan el bebé a mamar", ya que "la producción de leche se incrementa cuantas más veces las madres le den el pecho a los neonatos".

La mayoría de las madres primerizas creen que sus hijos aumentan poco de peso. La Asociación Española de Pediatría afirma que muchas veces se trata de percepciones distorsionadas por las graficas orientativas con las que se trabaja normalmente. Dichas gráficas están compuestas en su mayoría por niños alimentados con biberón y que suelen estar más "gorditos". No obstante, todos los especialistas y expertos en la materia coinciden en un mismo punto: ante cualquier duda lo mejor es acudir al pediatra y seguir sus instrucciones.