Que los familiares cuidadores de enfermos y las personas en situación de dependencia se tomen un momento para ellos mismos y aprendan a auto cuidarse. Es el principal objetivo que tienen el taller de memoria y el grupo de apoyo que comenzaron ayer en la sede de la Cruz Roja en Toro, situada en la calle Alberca de Capuchinos.

Una iniciativa que comenzó en la tarde de ayer con la realización del taller de memoria por parte de la voluntaria de Cruz Roja y psicopedagoga Natividad González y del grupo de apoyo impartido por la psicóloga de la asociación Patricia Samaniego al que asistieron once personas. El taller de memoria se impartirá cada lunes a las 17 horas a lo largo de dieciséis sesiones mientras que los grupos de apoyo se realizarán ese mismo día y hora en semanas alternas. Durante todo el año hasta junio.

En el taller de memoria se realizarán a diversas actividades lúdicas a través de la realización de juegos y dinámicas para mejorar las condiciones cognitivas así como del deterioro mental en cuidadores de familiares enfermos y personas en situación de dependencia. Un curso que como explica Samaniego "no está solo destinado al trabajo de la mente sino también a ponerse en contacto con otras personas y que se ocupen un poco de ellos mismos dentro del cuidado que realizan a diario a sus familiares".

Por otra parte, el otro de los cursos impartidos fue el grupo de apoyo en el que cuenta con doce inscritos y que ha comenzado como informó Patricia Samaniego "con la explicación a los asistentes cómo influyen los estados emocionales como la ansiedad además de enseñarles cómo influye la alimentación en su día a día". Unas temáticas donde como valora Samaniego "el objetivo del mismo es el autocuidado. Aprender a cuidarnos como cuidadores. Trabajamos el cuidado de las emociones, de la responsabilidad, de la salud física, de la ocupación del tiempo o hábitos de vida y que ira evolucionando en función de cómo avance el grupo".

Dicha iniciativa cuenta actualmente con cinco inscritos al taller de memoria y doce al grupo de apoyo. Aun así, el número máximo de asistentes del taller de memoria es de quince personas y para el que el plazo de inscripción seguirá abierto durante la impartición del mismo mientras que para el grupo de apoyo no hay límite plazas.

Un número de participantes donde como afirma Patricia Samaniego "esperamos que la gente se anime a venir y también hacemos un llamamiento a todas aquellas personas que se encuentran al cuidado de sus familiares o personas en situación de dependencia que no ven la necesidad suya de cuidarse. Las experiencias previas han demostrado que cuando acuden a los mismos es una hora a la semana que tienen para ellos mismos y que les acaba resultando muy beneficiosa". Unos cursos donde afirma Samaniego "normalmente, las personas que acuden estos talleres son personas mayores que están cuidando sus familiares".

En definitiva, una iniciativa destinada al cuidador de enfermos y a las personas en riesgo de exclusión para que aprendan la importancia que tiene su autocuidado en la labor que desempeñan a diario.