Isabel Pantoja podría haberse topado con la suerte en todos los ámbitos de un solo plumazo. La tonadillera, que se enfrenta a una abultada deuda que podría obligarla a abandonar Cantora y encontrar un nuevo hogar, podría estar ante una nueva fórmula para conseguir dinero. Así lo ha revelado 'Así es la vida', donde han sacado a la luz una posible nueva ilusión amorosa para la Pantoja.
¿Qué tiene que ver una cosa con la otra? Pues que este hombre misterioso podría estar invirtiendo en la tonadillera. Se trataría de un empresario canario que, según Carmen Borrego, "asegura que Isabel Pantoja está enamorada y se está dejando querer por un ingeniero de caminos jubilado".
Además, este hombre, según la información recopilada por el programa de Telecinco, "es socio de una de las sociedades donde se están facturando los contratos de la tonadillera en canarias". Borrego ha ido más allá: "Él ha querido ser partícipe de esa sociedad e invertir dinero en Isabel Pantoja".
El drama de viviendas de la todanillera
"Entonces, Isabel se estaría planteando seriamente irse a vivir a Canarias", lanzó al aire Sandra Barneda. Borrego recogió el guante y contestó: "Todos sabemos que Isabel Pantoja por amor ha hecho muchísimas cosas".
En cuanto a sus problemas económicos, la colaboradora también se mojó: "Yo esto de que el patrocinador tenga que llevarle todo y solucionarle la vida a Isabel Pantoja... yo creo que ella ya es muy mayorcita para solucionarse la vida ella misma".
Y es que estas últimas semanas la nueva residencia de Isabel Pantoja está siendo un tema de lo más comentado. Las primeras informaciones apuntaban a que la tonadillera podía mudarse a Madrid, pero la información ha sufrido un giro de 180º y ahora su futuro podría ser totalmente distinto. La capital sí que será su residencia profesional, pero la habitual tendrá como destino Canarias.
José Antonio Avilés matizó las informaciones: "Donde quiere estar temporadas de descanso y tranquila es en Canarias". Los más conocedores del caso sabrán que hace un tiempo vive en la comunidad una persona muy cercana y con relación de sangre en las islas: su sobrina Anabel. Ella ya se ha asentado lejos de la península y, pese a sus constantes traslados a la capital para atender su agenda profesional, está la mar de agusto en su nuevo hogar y disfrutando del buen tiempo, el sol y la playa.
