Emilio Merchán y Diego Cosgaya tampoco tuvieron suerte ayer en la Final B de K-2 1.000 metros correspondiente al Campeonato del Mundo de Aguas Tranquilas en una jornada nuevamente nefasta para los intereses españoles. Y es que, el cuádruple medallista olímpico David Cal no pudo alcanzar el podio en la final de C-1 de 1.000 metros de los Mundiales de piragüismo, en la que fue cuarto, mientras que el C-4 ocupó la novena plaza, por lo que España aún no ha estrenado el medallero en la cita mundialista que concluirá hoy en la ciudad polaca de Poznan.
La selección española, que aspira a repetir las cuatro medallas obtenidas en el Mundial 2009, mantiene importantes opciones en las finales de 200, 500, 5.000 y el relevo, entre ellas las lideradas por los campeones olímpicos Saúl Craviotto y Carlos Pérez Rial en K-2 200, el K-4 500 femenino y el relevo. Sin embargo, varios de los principales pilares de este combinado español regresarán a casa sin haber cumplido con sus objetivos.
El pontevedrés David Cal se quedó a las puertas de un podio que coparon el uzbeco Vadim Menkov, el húngaro Attila Vadja y el alemán Sebastian Brendel. El cuádruple medallista olímpico español, que ha ocupado puesto de medalla durante una parte del recorrido, rondó la gloria hasta el último metro en una final muy disputada por el potencial de sus protagonistas.
Menkov, ausente en el pasado Europeo en Trasona, revalidó ayer el título mundial logrado el pasado año en Canadá, donde Cal fue séptimo. El uzbeco apostó por una estrategia ambiciosa desde la salida, una propuesta que en alguna cita internacional acabó pagando muy cara. Sin embargo, en esta ocasión su resistencia le ha permitido sumar su segundo mundial consecutivo.
Por su parte, el C-4 integrado por Campos, Picallo, Ramos y José Manuel, acabó último en la final en las que la tripulación española, con todos sus integrantes gallegos, fue la primera de las nueve finalistas en colocarse en la línea de salida.
Después de haber entrado en final directa por la retirada de países inscritos, los españoles dejaron notar su falta de entrenamiento.
En finales B, con la sorprendente inclusión de algunas figuras internacionales -medallistas olímpicos, mundiales y europeos como es Emilio Merchán- a las que el temporal y el oleaje existente durante la disputa de las semifinales despojaron de su escenario habitual, las cuatro embarcaciones españolas lograron dos segundos puestos y otros dos quintos.
Uno de los damnificados del oleaje fue el K-2 de los hasta ayer vigentes campeones del mundo Merchán y Cosgaya, embarcación que fue segunda en un mano a mano con los belgas Cauwenbergh y Maesen, que entrena el técnico asturiano Carlos Prendes.
Sin embargo, el palista zamorano y su compañero palentino firmaron una de las mejores actuaciones españolas del día junto con la realizada por Javier Hernanz, que también marcó el segundo mejor tiempo en la final B de K-1 por detrás del canadiense Van Koeverden, otra de las estrellas piragüísticas relegadas a las finales de consolaci-ón en la distancia de 1.000 metros.
