La Junta de Castilla y León ha tomado medidas ante la mortandad de aves electrocutadas en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila, donde en 2017 murieron tres avutardas y varias rapaces. Por este motivo, la Administración regional solicitó a Iberdrola que tomara las medidas oportunas para evitar la colisión de las aves con los tendidos eléctricos que cruzan el parque, y la compañía ha comenzado esta semana la modificación de 2,5 kilómetros de línea eléctrica entre Villafáfila y San Agustín del Pozo.

La eléctrica está colocando "salvapájaros", cintas que cuelgan del tendido para hacerlo más visible a ojos de las aves para evitar su colisión, y aíslan todos los postes para evitar también la electrucución. Este sistema se instala por primera vez en la Comunidad y sustituye los antiguos aislantes de cristal por unos muelles de gran tamaño.

Durante los últimos años, el personal de la Junta de Castilla y León que trabaja en la Reserva Natural había detectado una alta mortandad de fauna en este tramo de tendido, donde perecían varias avutardas cada año por choque -en 2017 al menos tres ejemplares- y se estaban electrocutando diversas rapaces. Ante la gravedad de la situación, los hechos se pusieron en conocimiento de Iberdrola, como propietaria de la línea, que inmediatamente se reunió con el Servicio Territorial de Medio Ambiente para evaluar el problema y ver las posibles medidas a tomar. Fruto de este intercambio de información, la Junta de Castilla y León e Iberdrola acordaron una serie de modificaciones para reducir la grave amenaza que suponía para la fauna de la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila este tendido.

También se decidió cambiar dos postes peligrosos en la localidad de Cerecinos de Campos, uno de ellos solicitado por Medio Ambiente por la alta mortalidad de rapaces en él y el otro localizado por la propia empresa por un problema similar.