Los peregrinos que recorren la ruta jacobea de la Vía de la Plata se encuentran, nada más llegar a Roales del Pan, con una curiosa comitiva de bienvenida liderada por dos águilas, y de la que también forman parte una jirafa, un lobo, un ciervo y muchísimos otros animales, además de un Zangarrón, un ángel, Sansón e incluso Blancanieves.

Son las archiconocidas esculturas de la finca "El Recreo", elaboradas por José Domínguez Carbajo, un artista que no podrá componer más obras para adornar su huerta y su pueblo pues falleció el pasado mes de abril a los 81 años de edad.

La familia Domínguez Carbajo quiere aprovechar estas páginas para agradecer las "enormes muestras de apoyo que en estos últimos meses hemos recibido por parte de tantos vecinos de Roales del Pan que nos han demostrado lo mucho que le querían".

José Domínguez Carbajo dejó detrás de sí un buen recuerdo entre los roaleños que le conocieron, y también algunas obras que donó a su pueblo de forma altruista, como el Cristo que levantó en el cementerio de la localidad para rendir homenaje a los fieles que allí descansan.

La imagen del crucificado fue bendecida el 1 de noviembre de 2007, un acontecimiento que este diario aprovechó para dedicar un reportaje a su autor, un escultor tardío y autodidacta que comenzó a elaborar figuras de cemento para "matar el aburrimiento", una vez que se jubiló tras toda una vida trabajando en la construcción.

Él mismo elaboraba un armazón sobre el que arrojaba el cemento que moldeaba y pulía con mucho cuidado y, una vez seco, pintaba la forma resultante con vivos colores. Así, poco a poco fue creando distintos personajes que "plantaba" entre las verduras que crecían en su huerta. Aunque nunca recibió formación artística, el peculiar museo al aire libre de José Domínguez Carbajo llama poderosamente la atención de todo el que pasa por Roales -las figuras más grandes se pueden ver desde la carretera Nacional 630- e incluso le llegaron a encargar imágenes religiosas para localidades tan lejanas como Villardeciervos, donde conservan una Virgen de este escultor.

Los vecinos de Roales destacan el carácter afable del artista, que incluso abría las puertas de "El Recreo" desinteresadamente a quienes le pedían conocer sus obras de cerca.