"Todas las decisiones tomadas respecto a la explotación de la planta corresponden exclusivamente y son responsabilidad de la propiedad de la instalación, la Mancomunidad de Sayagua, y la empresa contratada por ésta para llevar a cabo la explotación". Así lo afirma el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, en la respuesta por escrito a la pregunta formulada por la procuradora de Podemos Zamora, María José Rodríguez Tobal, relativa a la estación de tratamiento de agua de Carbellino que abastece a los pueblos de la comarca de Sayago.

Una respuesta donde el responsable regional incide en lo ya dicho públicamente en las Cortes, como que "se dejó fuera de servicio el sistema original de oxidación mediante dióxido de cloro, que se ha sustituido por un depósito y una dosificadora de hipoclorito sódico". Ese sistema retirado es el que ahora recomiendan los técnicos de la Junta que vuelva a activarse para solucionar los problemas de contaminación por trihalometanos en el agua.

Y tal es la causa de que la plataforma en defensa de la sanidad pública de Sayago culpe directamente a la Mancomunidad Sayagua de "permitir que se quedara fuera de servicio una estación moderna y puntera". Lorenzo Ferrero, uno de los representantes de esa plataforma, aseguró que "hemos estado en manos de gente incapaz, que no ha mirado por los intereses colectivos de la comarca"; y se preguntó "con qué cara los ediles que en 2004 asumieron esa planta van a enfrentarse ahora a tomar la decisión de recuperar el sistema de depuración".

Llegó incluso a comparar la gestión de la mancomunidad en el otro lado del embalse de Almendra, en la provincia de Salamanca, con la de Sayagua en la parte zamorana de las aguas del Tormes. "Esta mancomunidad está desconectada de la realidad, actúa con total oscurantismo y ahora nos enteramos de que un sistema moderno de depuración decidieron dejarlo en desuso".

La plataforma recordó ayer en una comparecencia ante los medios cómo la Junta de Castilla y León hizo una inversión de 5,5 millones de euros, con un sistema de depuración eficiente; "alguien tendrá que pedir responsabilidades de por qué se dejó de utilizar" apuntó Jerónimo Cantuche. "Se les entregó un Mercedes (en referencia a un coche de alta gama) y la Mancomunidad lo ha convertido en chatarra" sentenció Lorenzo Ferrero.

Carlos Pedrero apuntó a la responsabilidad de la Junta, que está "consintiendo los desmanes del pasado y lo están pagando los sayagueses que llevan bebiendo agua con trihalometanos desde hace más de 30 años. Estas formas de gestión del agua son feudales".

Los miembros de la plataforma aseguraron que "ha habido una deslealtad con el origen de una subvención", en referencia a los 5,5 millones invertidos en 2004 por la administración regional para dotar de una instalación "que han dejado sin servicio".

El consejero de Medio Ambiente especifica en la respuesta escrita sobre la depuradora de Carbellino que "se encuentra fuera de servicio el filtro banda para la desecación de los fangos procedentes del espesador; el tendido de descarga de reactivos para su trasiego está en aparente estado de abandono; se ha sustituido el uso de sulfato de alúmina como coagulante por cloruro de aluminio y el uso de poliacrilamidas como floculantes se ha sustituto por el producto comercial Actipol A1-S PWG; actualmente se utiliza como preoxidante en cabecera peróxido de hidrógeno en vez de dióxido de cloro y como desinfectante final hipoclorito sódico en vez de dióxido de cloro previstos en proyecto. Y el depósito exterior de sulfato de alúmina ahora contiene cloruro de aluminio y el depósito exterior de ácido clorhídrico ahora contiene ácido sulfúrico".

Con tales argumentos "hemos descubierto que en el pasado está las claves de la desastrosa gestión del agua en Sayago" precisó Carlos Pedrero. Por ello, la Plataforma por la Sanidad, que el próximo viernes ha convocado una asamblea en Bermillo para informar a los sayagueses de la situación, no cejará en su empeño de tener acceso al contrato de la gestión del agua firmado con la empresas Sayagua Servicios.

Prudencia Garrote reveló la "preocupación" de los vecinos por el estado del agua; "muchos me preguntan ¿pero se puede beber?". Y pidió que la Mancomunidad informe sobre los depósitos donde se hacen los análisis del agua y "con qué periodicidad" se lleva a cabo la limpieza de los depósitos".