La Virgen de Socastro ya descansa en el castro celta de Villamayor de Campos donde se asienta su ermita, este año rodeada de una increíble vegetación gracias a las intensas lluvias. La imagen pasó el mes de mayo en la parroquia de Santa María, donde sus devotos la podían visitar cada día para rezarle el rosario, y ya ha vuelto a su ubicación habitual.