Una nueva bodega instalada en Fornillos de Fermoselle por la asturiana Liliana Fernández y el madrileño José Manuel Benéitez incrementa a quince las integradas en la Denominación de Origen Arribes según informó el Consejo Regulador de la DO. "El hato y el garabato" es un proyecto familiar de dos jóvenes "enamorados desde pequeños del pueblo de sus abuelos y de la naturaleza". Ambos, según precisan en su nota de presentación, se conocieron "en Ávila, estudiando Ciencias Ambientales, y nos animamos mutuamente a estudiar Ingeniería de Montes. Fantaseamos durante lustros con montar algo en el pueblo". En 2005 se mudaron a Zamora por trabajo, "pero pasarían años hasta que la vida o el destino nos llevaron a a encontrar nuestra pasión: El vino". Señalan que "un aspecto fundamental de nuestro proyecto es la gestión sostenible de recursos naturales de los que dispone la zona, viñedos antiquísimos de variedades únicas en el mundo, con la finalidad de conseguir un producto de alto valor añadido.

Los vinos de "El hato y el garabato" son vinos de la Denominación de Origen Arribes elaborados de modo artesanal con mínima intervención enológica en bodega y sin tratamientos químicos en el viñedo".