Un vecino de Otero de Bodas ha cultivado una calabaza gigante en su huerto que ha alcanzado unas medidas desorbitadas, no sólo en peso, sino sobre todo en proporciones. La hortaliza mide 1,29 metros de largo y 62 centímetros de diámetro y roza los 30 kilos.

«Me llega casi hasta el cuello si la pones de pie», asegura el orgulloso propietario, Tino García Ferrero. Sus descomunales medidas impiden que sea cogida por una sola persona, por lo que es necesario moverla con ayuda. Este vecino de Otero de Bodas achaca las desproporcionadas medidas de la calabaza al origen de las semillas. «Las traje de Asturias y yo creo que ha sido por el contraste de plantarlas aquí por lo que ha salido una calabaza tan grande», asegura Tino García. Aunque ahora ya está jubilado, explica que ha trabajado durante más de treinta años en Gijón. De hecho, vive en esta ciudad asturiana, pero ahora que dispone de más tiempo libre viaja siempre que puede viaja a Otero, donde cultiva todo tipo de hortalizas en su huerto, desde lechugas y zanahorias, a repollos y ajos. En cuanto al destino de la calabaza gigante, su propietario todavía no tiene claro qué hará con ella pero asegura que «quiero conservarla, así que lo más seguro es que la deje secar para tenerla de recuerdo». Sin duda, un curioso trofeo hortícola que podrán admirar sus amigos y vecinos que lo visiten en esta localidad sanabresa.