Venialbo lleva adelante la programación festiva con la euforia y la alegría propia de los pueblos inmersos en actividades religiosas, culturales, lúdicas y músicales, organizadas en esta caso con motivo de la celebración de Nuestra Señora de la Asunción y de San Roque. Este año Venialbo ha estado representado en su belleza por la reina Alba Garretas del Pozo y las damas Mirian Garretas Sánchez, María Hernández Granado y Cristina Rodríguez de Dios. En su saluda, el alcalde del municipio, el popular Jesús Vara, destacó que «Venialbo viene siendo un ejemplo de generosidad, de colaboración ciudadana de un buen número de vecinos, la inmensa mayoría, que han hecho de este rincón singular en la provincia de Zamora, un lugar más habitable, más moderno? un pueblo más humano y mejor?». «Entre todos hemos hecho que Venialbo sea la envidia en nuestro entorno, se sitúe en un lugar destacado y que sea objeto de atención por quienes nos visitan» dijo desde la balconada del Ayuntamiento.

Los colectivos de peñas han sido uno de los grandes protagonistas del colorido, de la vistosidad y de la alegría que ha irradiado el pueblo durante estos días, que además corrió con el pregón a cargo de la peña «El Tirón».

La jornada del jueves estuvo animada, de buena mañana, por la chocolatada con la que los peñistas recobraron las energías para proseguir en toda su salsa en la atmósfera festiva. Fue una jornada marcada por la celebración de una solemne misa castellana y el repique de campañas que protagonizó la agrupación de campaneros zamoranos. La población disfrutó del aperitivo organizado en el salón de usos múltiples. Fue además una jornada especial para el sector infantil que disfrutó a lo grande con los actos organizados en la pradera.

La festividad de San Roque también estuvo marcada por la celebración religiosa en honor al santo y, durante la tarde, por un encierro urbano con la suelta de vaquillas. La orquesta «Nevada» armonizó la verbena de la noche.

Venialbo vivirá hoy, a las 10.30 horas, el encierro mixto a caballo, con tres toros y seis cabestros de la ganadería de Miranda de Pericalvo.