El Ayuntamiento de Molacillos reclama el arreglo urgente de la carretera de acceso a la localidad, cuyo notable mal estado dificulta la circulación de vehículos. Esta calzada, que se corresponde con la ZA-711, está llena de baches y apenas cuenta con señalización horizontal, ya que sólo dispone de líneas pintadas en el centro para separar ambos carriles, pero carece de la mismas en los laterales para indicar las cunetas. Su mal estado es incluso mayor a medida que se circula en dirección a Coreses.

Se da la circunstancia de que la mejora de esta vía no sólo estuvo proyectada sino que llegó a adjudicarse en 2008 por más de 2,5 millones de euros a la empresa Hermanos Tábara S. A. La obra incluía la mejora de la plataforma y firme de la carretera ZA-711, es decir, el tramo que va desde CL-612 a N-122 (Molacillos-Coreses). Los primeros trabajos incluso llegaron a comenzar en la travesía de esta última localidad. Sin embargo, la empresa concesionaria recurrió a un concurso de acreedores, lo que desencadenó la anulación de la adjudicación y la paralización de la obra. Por ello, el actual equipo de Gobierno se pregunta por el destino final del presupuesto consignado para esta ejecución, que finalmente no se llegó a realizar sin que se haya reinvertido el importe adjudicado.

Tanto la alcaldesa de Molacillos, Paz Fraile, como el de Coreses, Luis Hernández, han mantenido varios encuentros con el delegado territorial de la Junta, Alberto Castro, en busca de respuestas y de una nueva adjudicación de la obra.

De momento, ha sido la Diputación Provincial la que ha facilitado una solución provisional mediante el arreglo de un camino agrícola para acceder a Molacillos. Esta vía alternativa ha sido acondicionada mediante la aplicación de una capa de rodadura, con lo que se ha convertido en el acceso más empleado por los vecinos frente a la carretera ordinaria. Sin embargo, el equipo de Gobierno municipal reclama la reparación de la calzada para contar con un acceso apropiado.