Una máquina que empezó a arder cuando realizaba cortas de madera para «un particular» de Moldones ha sido con toda probabilidad la causa del incendio forestal más importante del verano en la provincia en cuanto a superficie. El fuego, declarado hacia las dos de la tarde del pasado martes, arrasó 290 hectáreas de superficie, 60 de ellas de pinar y las 230 restantes de matorral. Aunque ayer por la mañana permanecía activo, los medios de la Junta ya lo tenían bastante controlado tras el amplio despliegue de aviones, carrocetas y cuadrillas, con el apoyo de los bomberos de San Vitero y la Guardia Civil que durante toda la tarde del martes trabajaron y hasta bien entrada la noche para continuar ayer.

Tales son los datos oficiales aportados ayer por el delegado territorial de la Junta, Alberto Castro, quien confirmó la apertura de una investigación sobre «la situación administrativa de esa corta de árboles. El sentido común dice que en agosto, con los riesgos en este momento, hace falta tener mucho cuidado para realizar estas labores, aún más cuando se está haciendo la corta de madera en un pinar particular y debería tener todos los elementos de precaución en marcha».

En resumen, que la Junta intentaba ayer determinar si la empresa que realizaba las labores en el monte contaba con todas las autorizaciones «para la corta y extracción de pinos, y si tenía todos los elementos de prevención activos». ¿La ley permite realizar estos trabajos en pleno verano?. «Lo que no es lógico es cortar pinos en este momento» contestó al delegado. «Está claro es que se depurarán responsabilidades, como se ha hecho siempre».

Ante la insistencia de los periodistas, el responsable de la Junta aseguró que (en caso de haberse solicitado el permiso) «el departamento de Incendios hubiera informado en contra, por supuesto. No deberían estar haciendo eso».

Más clarificadora fue la información del alcalde de Figueruela de Arriba (al que pertenece Moldones), Carlos Pérez, quien admitió que ni el Ayuntamiento ni la Junta Vecinal «teníamos conocimiento de que se estuvieran haciendo esos trabajos en este momento». Sí disponía la empresa de la autorización para la corta y extracción de madera que había solicitado la Junta Vecinal «pero con unas condiciones y en el tiempo que se pudiera; en el invierno, no en pleno verano» explica el alcalde. «Para nosotros ha sido una sorpresa total, ignorábamos que la empresa estuviera allí».

Según ha explicado Carlos Pérez, la Junta Vecinal había acordado la extracción de la madera de un pinar con la empresa Interpanel, «pero ahora hemos descubrimos que lo tenía una subcontrata» por los problemas de la maderera de Villabrázaro.

El alcalde alistano lamentó las «cuantiosas pérdidas» que el fuego ha provocado para el Ayuntamiento porque el pinar quemado (en la zona llamada de «La Falitosa») «es el más productivo micológicamente. Tenemos un coto de setas que generaba ingresos para el pueblo y eso ahora está perdido».

Aunque el fuego se extendió con fuerza formando un frente muy extenso, no afectó a la Reserva de Caza de la Sierra de la Culebra.

Extensión

El perimetraje del incendio realizado por el helicóptero (aparece delimitado en el centro de la imagen) determina una superficie quemada de 290 hectáreas.

Medios

Aeronaves de Rosinos, Villardeciervos, Tabuyo y Matacán, siete cuadrillas de tierra, dos técnicos, nueve agentes medioambientales, bomberos de San Vitero.