El mercado de los cereales da síntomas de debilidad ante las previsiones de cosecha que, tras la abundancia de lluvias en abril, han mejorado considerablemente. Cayó ligeramente el precio del trigo y la cebada, aunque todavía es pronto para marcar tendencia. Los lechazos subieron y el porcino de ceba y los tostones mantuvieron guarismos. Los lechones, a la baja.