Vecinos y residentes de Requejo completaron la pasada semana la legalización de la asociación, denominada «El Texus», que defenderá los intereses vecinales del pueblo, entre ellos los terrenos para el Tren de Alta Velocidad. De acuerdo a sus estatutos, promoverá actividades socioculturales en el municipio además de velar por los intereses comunes. La Junta directiva está presidida por María Isabel González Iglesias que contará además con un vicepresidente, un tesorero y dos vocales.

La asociación se ha formalizado en asamblea constituyente e integrada por 20 asociados, que el pasado sábado obtuvieron la documentación visada y aprobada desde la Junta de Castilla y León. Uno de los primeros objetivos será obtener toda la información sobre el trazado del Tren de Alta Velocidad por el municipio y en particular la ubicación de la escombrera en terrenos del municipio, que cuenta con el rechazo de la mayor parte de los vecinos.

La asociación es totalmente independiente de la Junta Vecinal del Monte de Parada, como han aclarado los miembros de la nueva asociación «El Texus».

El trazado de la vía derecha a su paso por la zona contempla la construcción de un nuevo túnel en Requejo de 2,4 kilómetros de longitud, unido a un viaducto de los Pedregales que irá situado a la salida del túnel de Requejo, con una longitud de 880 metros. Está contemplado un túnel nuevo en el término limítrofe de Padornelo de 6,4 kilómetros de longitud y 52 metros de sección. A la salida de este túnel por la vía derecha está proyectado otro viaducto de Leira, de 168 metros, y el viaducto del río Pedro con 295 metros de longitud, de acuerdo a la relación de infraestructuras aprobadas por el Ministerio de Fomento. En relación a la ocupación de terreno, especialmente de titularidad privada, la asociación tiene previsto seguir el proceso de expropiación y asesorar e informar a los vecinos afectados o de la asociación.

La ocupación con la escombrera es el tema que «más preocupa» a la asociación porque el volumen procedente de las obras se ha cuantificado en 1.930.290 de metros cúbicos. Ese volumen de residuos de obra conlleva «la circulación de camiones por el casco urbano», según señalan miembros de la asociación, «con el consiguiente volumen de ruidos e impacto en las infraestructuras locales y la afección directa a viviendas y residentes».

El Ayuntamiento de Requejo y la Mancomunidad «Lago de Sanabria» trasladaron el pasado año las alegaciones respecto al uso de suelo rústico de especial protección como interés forestal y el tratamiento de los vertederos de acuerdo a la delimitación de Suelo Urbano de Requejo y la protección de las vías pecuarias de la zona afectada la Brea, el Cordel de Puebla y la Vereda Requejo. El dictamen municipal es favorable y condicionado a la medición del ruido durante la actividad. A título particular se presentaron alegaciones por la posible desecación de un arroyo en la zona afectada por el trazado. En cuanto al uso de los terrenos para la escombrera afecta a 9 hectáreas de brezales que califica de «secos», el espacio ha sido objeto de desbroces «por lo que se considera que no hay afecciones importantes».