La presidenta de la asociación de hostelería y turismo de León, María Ángeles Luengo, planteó ayer la posibilidad de que los restauradores de la provincia exijan "contratos por escrito y cantidades por anticipado" a los clientes que deseen reservar los establecimientos para celebrar algún tipo de convite. La medida intenta evitar que se produzcan nuevos casos en los que la clientela abandona el local sin abonar las consumiciones, como el registrado a principios de semana en el municipio berciano de Bembibre, donde unos 120 invitados a un bautizado abandonaron precipitadamente el restaurante en el que se celebraba el banquete . "Cada vez hay más problemas, es importante que la gente se conciencie", explicó Luengo.
Respecto a los casos denunciados en Bembibre y Ponferrada, donde el grupo que protagonizó la espantada, de entre 150 y 200 personas, dejó a pagar más de 10.000 euros correspondientes al banquete de una boda, la presidenta provincial de los hosteleros aseguró no tener constancia de que se hayan producido casos similares en el territorio provincial.
